"Todos los días la misma pregunta"

Miguel Sebastián lo anunció ayer solemnemente: "¡Voy a repetir la misma pregunta todos los días hasta que me contesten!". Su figura, recortada por un quiosco de orquesta en un parque de Villaverde. Enfrente del candidato municipal socialista, 400 personas con gorras de béisbol del PSOE. Sobre su cabeza, el sol de mediodía. Sebastián se refería a su cuestión, inaugurada el pasado miércoles en un debate en TVE, sobre las relaciones del alcalde Ruiz-Gallardón con Montserrat Corulla, imputada por el caso Malaya y presuntamente testaferro de Juan Antonio Roca en Madrid. Un tema que ha monopolizado la discusión política y que, en la recta final de campaña, sigue siendo el elemento más controvertido entre las dos grandes formaciones.

"Si yo hubiera contratado a una tonadillera, la derecha diría que es para la fianza", dice Blanco

"No es personal, quiero saber la relación de Gallardón con una persona que ha estado con la concejal de Urbanismo en un palacete", dijo Sebastián, que ya estaba en pleno fragor mitinero. Y sudando. El candidato no sólo no eludió la polémica referencia a las relaciones "personales" de Gallardón, sino que ironizó sobre el asunto: "¿La concejal de Urbanismo también estuvo con esa persona por un tema personal?", y reiteró su argumento de que "la derecha tiene la piel muy fina" y que su inquisición es "porque los madrileños tienen derecho a saber". Sus compañeros de acto, Rafael Simancas, candidato a la presidencia regional, y José Blanco, secretario de Organización del PSOE, abundaron también sobre el asunto. Pero Blanco introdujo un nuevo elemento: Isabel Pantoja. "Si yo fuera candidato y hubiese contratado a una tonadillera implicada en la Operación Malaya, la derecha diría que es para la fianza". En privado, sin embargo, algunos socialistas se muestran contrarios a la estrategia.

Gallardón, en una entrevista a Efe, aseguró que Sebastián, con su pregunta, "ha vulnerado lo que desde la transición habíamos, sin decirlo, acordado todas las formaciones políticas, y es que las campañas eran un debate de ideas y de propuestas y que se renunciaba a entrar en lo personal". El alcalde también afirmó que ha respondido a la pregunta de Sebastián: "Ya contesté que no he tenido ninguna relación profesional con nadie imputado".

Simancas, aparte de recordar los puntos esenciales de su programa en educación, equipamientos y sanidad, habló de la polémica al señalar que su rival, Esperanza Aguirre, se haría "presidenta del club de fans de Sebastián". También que tiene "las manos peladas" de tanto aplaudir al candidato socialista. Todo por la relación entre Aguirre y Gallardón, no demasiado buena.

Además, Simancas y Sebastián han introducido en la campaña local la guerra de Irak y "las mentiras" del Gobierno de Aznar, al que "siempre ha estado supeditado Gallardón", y recordaron uno de sus leit motiv electorales: "La participación es la clave".

Por su parte, Esperanza Aguirre, que en sus últimos mítines (ayer, en Alcorcón) ha repetido palabra por palabra su discurso, alude siempre a la oficina económica de Presidencia para arremeter contra Sebastián. "Yo creí que esa oficina servía para aquello de que Zapatero aprendiera economía en tres tardes. Y para lo que sirve es para presionar a instituciones como la CNMV y actuar contra los empresarios que no le gustan", recalcó ayer. Aguirre se lanzó luego contra Sebastián e ironizó con que se mantenga como candidato a la alcaldía. Aseguró que está "desesperado" y que su propio partido le ha vuelto la espalda.