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Entrevista:Xosé C. López Orozco | Alcalde de Lugo

"Trabajé mucho para que hubiera un cambio en Galicia"

Las encuestas le sitúan como el alcalde más valorado de Galicia y serio aspirante a revalidar la alcaldía. Sin embargo, el candidato socialista por Lugo, Xosé Clemente López Orozco (Fazouro, Foz, 1947), no se fía. La oposición dice que se dejó promesas por el camino, pero él tiene algo muy claro: "Es necesario para Lugo seguir votando a Orozco".

La cercanía al ciudadano es una de sus grandes armas y está "tranquilo" con su gestión. Según sus cálculos se están invirtiendo en el municipio "unas 350.000 pesetas por cada lucense", remarca. Y es que "nunca jamás se hizo tanto en este ayuntamiento".

Pregunta. ¿No se siente un poco agotado?

Respuesta. Para nada. Es una maravilla llegar a una etapa de estas características. Las campañas son la culminación del trabajo realizado durante cuatro años.

"No encuentro que la agenda electrónica sea un instrumento eficiente para tomar notas; aún me resulta más fácil apuntar en la 'libretiña"
"Pobre del que no sea capaz de pactar, porque pactar es compartir y en política nunca hay verdades absolutas. Yo llegaré a acuerdos"
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P. ¿Satisfecho?

R. No totalmente, porque siempre quedan cosas por hacer, pero sí satisfecho, porque Lugo está mejor y eso resulta entrañable.

P. ¿Qué le faltó?

R. La finalización del auditorio y del nuevo puente. Luego queda, pensando ya en la próxima legislatura, la llegada del AVE, concluir las autovías que unirán Lugo con Santiago y Ourense, el terreno para el nuevo polígono de As Gándaras, fomentar más el turismo, desarrollar en su totalidad la ley de autonomía personal y mejorar aspectos como la seguridad o el deporte.

P. Y el plan general.

R. Sí, pero el plan general, una vez concluidos los pequeños flecos que aparecieron en las últimas fechas, estará listo rápidamente. De hecho, las grandes líneas del plan ya se conocen.

P. PP y BNG quieren uno nuevo. Dicen que el suyo es realista.

R. Ésa es su propuesta. Pero durante cuatro años no se les vio nunca ninguna alternativa.

P. ¿La imposibilidad de adjudicar las obras del auditorio es la gran espina que tiene clavada?

R. Sí. Sin lugar a dudas, porque se actuó muy injustamente con Lugo. Alguien, algún día, tendrá que dar una explicación de por qué una vez que el asunto pasó en tres ocasiones por el Consello de la Xunta aparece un informe que nadie pidió y nadie esperaba. Apareció justo cuando estaba a punto de adjudicarse la obra. Lo sentí como una herida en el corazón de Lugo.

P. ¿Cómo está el puente?

R. Cumpliendo plazos. Está en estudio el proyecto informativo. Espero que no sea necesario el estudio de impacto ambiental y, a partir de ahí, haremos el proyecto, que todavía estamos a tiempo de concluir este año.

P. Esta vez se enfrenta a otro candidato, el popular García Díez, que en su día también tuvo mayoría absoluta. ¿Prevé unas elecciones más reñidas?

R. Las elecciones siempre son reñidas, pero no dependerá tanto del hecho de si uno fue alcalde con anterioridad o no.

P. ¿Cree en el efecto Orozco?

R. Existe una persona trabajadora, honrada y dedicada por completo al trabajo que gestionó cerca de 300 millones de euros para Lugo. Si a eso se llama efecto Orozco, puede ser que exista.

P. Las encuestas dicen que incrementará su mayoría. ¿Tranquilizan?

R. No. Las encuestas dan pistas de por dónde pueden ir las cosas, pero sólo vale la del 27-M. Ese día, cuando salen las papeletas de las urnas y se recuentan, es cuando está la encuesta definitiva y la única válida.

P. El candidato popular dice que no se debe votar a Orozco porque incumplió compromisos.

R. Pues yo digo que es necesario para Lugo seguir votando a Orozco, porque cumplió con su programa, por lo menos en un 95% y, además, ofrece un trabajo continuado para mejorar la ciudad en cooperación y unión con las otras administraciones.

P. ¿También con la cooperación de la parte nacionalista del Gobierno de Galicia?

R. También. Es cierto que hubo alguna dificultad de vez en cuando, pero, como ya dije en otras ocasiones, soy de los que trabajé muchísimo para que hubiera un cambio en Galicia y que no le quede ninguna duda a nadie de que está favoreciendo a Lugo.

P. Pues en la firma de la fundación que rige el Centro Tecnológico Agroalimentario dicen que hubo un desplante de las consellerías de Industria y Medio Rural.

R. No. El Gobierno estaba representado por el presidente Emilio Pérez Touriño y la Xunta aprobó y decretó su aceptación para participar en el centro. No hubo ningún desplante.

P. ¿Quiere esto decir que las relaciones están normalizadas?

R. Existen relaciones y lo vamos a ver estos días con la entrada en funcionamiento del nuevo museo de San Roque. Se verá que todo está en una línea de normalidad. Lo que sí siempre defenderé, por encima de todo, es la institución y mi ciudad. Esa es mi obligación.

P. Imagine que no consigue la mayoría absoluta y necesita al BNG. ¿Será posible?

R. Lucharé y trabajaré para conseguir una mayoría que permita gobernar que, además, creo que es necesaria en nuestra ciudad. Pero los que tienen la última palabra son los ciudadanos y, si así fuese, pobre del que en política no sea capaz de pactar, porque pactar es compartir y en política nunca hay verdades absolutas. Por lo tanto, como yo quiero seguir en política, llegaría a acuerdos con aquellos que hagan que Lugo siga creciendo.

P. Dicen que el poder desgasta. ¿Siente que los 8 años que lleva en el poder pudieron minar parte de su credibilidad?

R. No, porque yo ejercí el poder de un modo muy compartido y creo que muy democrático, atendiendo y escuchando mucho a la gente y estando muy al lado de las personas. Pienso que supe pedir perdón cuando algo no se hizo bien y que supe dar explicaciones cuando fue necesario. No me siento desgastado. Al contrario, como no perdí contacto con la realidad sé lo que se hizo y lo que queda por hacer. No estoy, en absoluto, nada desgastado.

P. Se ha comprometido a que la próxima legislatura sea la del impulso definitivo del AVE a Lugo. ¿Cree que será posible?

R. Sí, sin lugar a dudas. De hecho, ya tenemos 15 kilómetros, la variante de la Pobra de San Xiao, que se están construyendo con características de AVE. Esa es una muestra clara de que el AVE está más cerca y mantengo el firme compromiso de trabajar en ese objetivo tan necesario.

P. Orozco no es partidario de poner coto a los mandatos.

R. A los mandatos les ponen coto los vecinos que cada cuatro años nos someten a un examen. También se acotan cuando se pierde la ilusión; cuando uno se cree que ya lo tiene todo hecho o cuando uno se cree imprescindible. Yo todavía no llegué a ese extremo y si llega espero tener a alguien a mi lado que me diga: "Pepe, estás perdiendo la ilusión". Cuando alguien me lo note y me lo demuestre dejaré la política. De momento estoy lleno de ilusión, ganas, nada cansado y aún me parece que estoy en el 13 de junio de 1999, mis primeras elecciones como candidato a la alcaldía.

P. El candidato del PP pide juego limpio.

R. Conmigo eso es totalmente fácil y no habrá problema ninguno. Se sabe desde un principio que nunca voy a insultar, que nunca voy a faltar al respeto y, por lo tanto, nunca voy a contestar cuando alguien insulte o falte al respeto. Sólo debato a partir de las ideas y las propuestas. Y cuando se dan las condiciones para debatir lo hago con mucho respeto.

P. Es usted pionero en nuevas tecnologías, hasta el punto de ser el protagonista de un videojuego.

R. Fue una gran idea. Es un modo de explicitar en la realidad cómo las nuevas tecnologías se deben utilizar en la vida diaria. Me alegro mucho del éxito que está cosechando esta iniciativa.

P. Incluso cuenta con una fuente cibernética.

R. Preciosa. Es un ejemplo del trabajo que se está haciendo para embellecer todos los barrios de esta ciudad. Forma parte de la campaña Lugo ponte bonito que ha impulsado este gobierno y que permitirá ver cómo poco a poco cambiamos Lugo y lo situamos en el siglo XXI, porque en esta ciudad, también en esta provincia, se perdió mucho tiempo.

P. Sin embargo, aún toma notas en una agenda de bolsillo.

R. Es cierto. No encuentro que la agenda electrónica sea un instrumento eficiente para tomar una nota pequeña de dónde hay un bache, un punto sucio, reparar mobiliario urbano o arreglar una fuga de agua. Aún me resulta más fácil apuntar en la libretiña.

P. ¿Nos puede leer las últimas anotaciones?

R. Sin problema. Parte proceden de un programa de radio en el que pude constatar, entre otras cuestiones, la preocupación que existe con el botellón. También tengo anotado un problema de grietas que existe en un muro de Frigsa; un tema relacionado con el depósito de agua del colegio de Nadela y la necesidad de mejorar uno de los accesos a una parroquia de la zona rural. La libretiña me permite realizar anotaciones in situ que repaso y trato de solucionar cada vez que llego al despacho. Es una gran ayuda, que, en efecto, aún no pude suplir con nuevas tecnologías.

P. Inmerso como está en la campaña, los problemas del Athletic, su equipo, habrán pasado a un segundo plano.

R. Sí, pero siento la situación en la que está inmerso. Espero que el tiempo que falta sea suficiente para quedarse donde está. Y que también se salve el Celta.

P. Teniendo en cuenta la vida que lleva, lo de la conciliación familiar es casi una utopía.

R. Vida familiar realmente poca. Hace poco salí de casa a las 8 de la mañana y regresé bien entrada la madrugada. Mi tiempo libre casi se limita a los domingos. Incluso ese día se puede ver acotado en función de si tengo partido de fútbol o no. Pero mi mujer es cómplice de mi trabajo y colabora conmigo en este sacrificio voluntario que me encanta hacer por Lugo. El político que se queje del trabajo que lo deje.

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