El PSE se inclina por asistir al homenaje institucional del Gobierno a la víctimas
Los socialistas esperan que los protagonistas del acto sean los afectados por el terrorismo
La dirección del Partido Socialista de Euskadi se inclina por asistir al homenaje a las víctimas del terrorismo organizado por el Gobierno vasco, que se celebrará el próximo 22 de abril en el Palacio Euskalduna de Bilbao. El PSE espera aún poder condicionar el discurso del lehendakari en un acto en el que las víctimas deberían ser "las protagonistas, dicen. El homenaje pretende ser un "acto de contrición" por el pasado de olvido institucional y social hacia las víctimas del terrorismo, según expresó la directora de Apoyo a las Víctimas, Maixabel Lasa. Un dirigente socialista indicó ayer a este periódico: "Al lehendakari no le puede resultar fácil ni gratis llegar a un sitio, el de las víctimas, donde nunca ha estado presente".
Aunque el secretario general del PSE-EE, Patxi López, tiene previsto aún hacer una ronda de contactos con el núcleo duro del partido para fijar la posición definitiva en torno a este asunto y no se descarta incluso un pronunciamiento de la ejecutiva, los socialistas vascos se inclinan por asistir a un acto al que han dado ya la espalda el Colectivo vasco de Víctimas del Terrorismo (Covite) y la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), y que ha sido duramente criticado por el Partido Popular.
Tampoco acudirán al homenaje ni la militante socialista y presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, ni la presidenta de la Fundación Fernando Buesa, Nati Rodríguez, viuda del dirigente socialista alavés asesinado por ETA. Precisamente el distanciamiento de la viuda de Buesa del acto institucional invitó a la reflexión interna a los dirigentes socialistas vascos. "Fue ella la que nos puso un poco en alerta con su reflexión", indica un destacado dirigente del PSE.
Hace varias semanas, Natividad Rodríguez planteó que, previamente a este homenaje institucional, el Gobierno vasco debería incidir en otras áreas de trabajo ya aprobadas en el Parlamento vasco, como la deslegitimación de la violencia a través de las aulas o en los medios de comunicación. La presidenta de la Fundación Fernando Buesa valora las acciones de reconocimiento realizadas por las instituciones, pero considera que el acto pretende ser "un colofón precipitado" de unas actuaciones que cree insuficientes. Un dirigente del PSE resume así su posición: "De alguna manera, el PNV tiene que pagar un precio. Al lehendakari no le puede resultar fácil ni gratis llegar a un sitio, el de las víctimas del terrorismo, donde nunca ha estado presente".
La no participación de los socialistas vascos, algo poco probable, rebajaría el perfil del acto institucional y dejaría al Gobierno tripartito en una situación de casi soledad. Con todo, el apoyo del PSE a la iniciativa gubernamental no será un cheque en blanco o exento de crítica. El PSE espera conocer de primera mano los detalles del homenaje y, sobre todo, saber si es posible condicionar el mensaje que Ibarretxe pretende trasladar en ese acto. Los dirigentes socialistas tienen aún muy presente las palabras que por libre dirigió el lehendakari a los asistentes a la manifestación convocada el 13 de enero pasado contra el atentado de ETA en Barajas. Las referencias realizadas entonces por el presidente vasco al diálogo como el "único camino" para lograr la paz y las críticas a "la politiquería" y a "los debates estériles" sentaron especialmente mal entre los socialistas, que ya asistieron a regañadientes a una marcha convocada de manera unilateral por Ibarretxe y sin haber consensuado el lema con nadie.
UGT también apoya
Para contrarrestar el goteo de desafecciones que se han venido produciendo desde que se presentó oficialmente el acto, el pasado 23 de marzo, Maixabel Lasa y su segundo, Txema Urkijo, han venido realizando intensas y discretas gestiones. Su objetivo es intentar sumar para que acudan al Palacio Euskalduna al máximo de víctimas y asociaciones que trabajan con las personas afectadas por actos de terrorismo. Varias asociaciones ya han confirmado su presencia, así como decenas de víctimas a título personal. Una delegación de UGT, encabezada por su secretario general, Dámaso Casado, acudirá al homenaje institucional.
El PP dejo claro desde un principio que no iba a poner sus siglas en un acto con cierto aire "preelectoral" y planteado a la medida de Ibarretxe. Los populares creen que la convocatoria carece de credibilidad si la impulsa el mismo Ejecutivo que concede ayudas económicas a los familiares de presos etarras y considera interlocutora válida a Batasuna.
