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Los ascensores de la línea 3 de metro no funcionan

Las personas con movilidad reducida que intenten acceder a alguna de las 11 estaciones de metro de la línea 3, recién inauguradas, se toparán durante este mes de octubre con un obstáculo que para muchos de ellos puede ser insalvable: los ascensores aun no están operativos.

Así lo admitió ayer Metro de Madrid, que explicó que por razones "técnicas y de seguridad" la puesta en marcha de los elevadores se hará de forma progresiva a lo largo de las próximas cuatro semanas. "En cualquier caso, está previsto que en noviembre estén todos los ascensores operativos", explicó una portavoz del suburbano.

La nueva línea 3 del metro, que ha permanecido cerrada todo el verano para ser sometida a una profunda remodelación de túneles, andenes y estaciones, fue inaugurada la pasada semana por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.

Deficiencias

El retraso en la puesta en marcha de los ascensores es una de las deficiencias en las nuevas estaciones que el sindicato UGT denunció ayer. "Han querido abrir la línea ya, sin tener en cuenta que aun faltan muchas cosas que mejorar para la comodidad y la seguridad de los viajeros", declaró Fernando Chicharro, secretario general de UGT en Metro.

"Querían poner en marcha el servicio el pasado día 23 de septiembre y no pudieron. Al final lo han hecho el día 30, pero deprisa y corriendo y estos son los resultados", añadió.

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Una inspección realizada el pasado domingo por el sindicato UGT en la estación de Legazpi, cabecera de la línea, encontró una docena de deficiencias en la instalación. UGT afirma que las mismas carencias se encuentran en las otras 10 estaciones de la línea. Entre ellas, destacan la ausencia de extintores y cámaras de seguridad, el no funcionamiento de los interfonos y el elevado número de máquinas expendedoras fuera de servicio.

"Hay otras dos carencias aun más graves", afirmó Chicharro. "La primera es que los concentradores [centros de control de las estaciones, desde donde se controlan todos sus elementos, como las escaleras mecánicas, los tornos de entrada o los sistemas contra incendios] aún no han entrado en servicio. Y la segunda es que en las estaciones en curva, como Plaza de España, Lavapiés y Embajadores, el conductor no dispone de imagen por el monitor para ver si hay viajeros subiendo o Bajando del tren. Se lo tiene que indicar otro trabajador haciéndole señales desde la mitad del anden", criticó.

Un portavoz de Metro desmintió ayer los argumentos esgrimidos por el sindicato. "Puede haber algún extintor fuera de sitio, pero la línea está totalmente controlada desde una base central en la estación de Moncloa y desde las propias estaciones. Además, con la reforma de la línea se ha pasado de 50 a 195 máquinas expendedoras, lo que ha reducido notablemente las colas", concluyó la portavoz.

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