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Reportaje:Fórmula 1 | Gran Premio de China

"A Renault le preocupa más el título de constructores"

Fernando Alonso asegura que irá a Japón el próximo fin de semana con mucha moral, pero que debe luchar contra "demasiados factores"

No hubo saludo cuando Michael Schumacher y Fernando Alonso aparcaron sus coches tras la vuelta de celebración de su primer y segundo puesto respectivamente. Alonso se largó, entró en la sala de espera para acudir al podio y fue allí donde se acercó por fin a Schumacher y le felicitó. "Buena carrera", le dijo mirando hacia otra parte. Y el alemán le respondió con un gesto similar. Está claro que los dos mejores pilotos del momento en la F-1 no están para bromas. Se entienden mal. Se respetan, sí, pero cada cual a lo suyo. Y lo suyo es ganar un campeonato que se le está complicando sobremanera a Alonso. Tras haberlo dominado con 25 puntos de ventaja sobre Schumacher, ahora es el segundo con los mismos puntos que el alemán, que le supera por el detalle decisivo de haber ganado una carrera más: siete en total.

"Fuimos mejores en seco y en mojado, pero dimos 40 vueltas sin lo uno ni lo otro", dice el español
"Decidimos cambiar las ruedas delanteras y dejar las traseras. Un error", reconoce la escudería
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En el podio, Alonso apenas lo celebró. Levantó su trofeo y dejó en el suelo la botella de champaña hasta que decidió tirarla a un mecánico de Renault, que no pudo controlarla por su peso. Se cayó al suelo y se rompió mientras que la de Schumacher -casi vacía- fue recogida por un mecánico de Ferrari que marcó la diferencia de lo que había ocurrido como queriendo significar: hasta en eso les ganamos. Fue una anécdota más, pero evidenció de nuevo el mal ambiente que se vive últimamente en Renault.

Alonso lo dejó claro sólo unos minutos más tarde, cuando le preguntaron si había tristeza en la escudería por haber perdido una carrera que podían haber ganado. "Algunos están tristes", respondió sin tapujos; "pero otros andan muy contentos porque hemos adelantado a Ferrari en el Mundial de constructores y porque así no me llevaré el número uno a otra escudería". Fue una clara referencia a ciertos directivos del equipo que, según él, no parecen muy interesados en que renueve el título de pilotos que ganó el año pasado. "Les preocupa más ser campeones de constructores que de pilotos. Prefieren asegurarse los puntos que suponen un segundo y un tercer puesto que una victoria mía y les da igual el orden". La escudería Renault, tras la carrera de China, en la que sumó 14 puntos, domina el Mundial de constructores con un punto de ventaja sobre Ferrari, que sólo pudo sumar los diez puntos de Schumacher en el circuito de Shanghai debido a que Felipe Massa tuvo que abandonar tras una colisión con el Red Bull de David Coulthard.

Alonso quitó toda la trascendencia, sin embargo, al error que cometió el equipo en el segundo repostaje, que duró 19 segundos y arruinó muchas de sus posibilidades. "Cambié las ruedas delanteras porque estaban completamente lisas y no podía hacer nada", agregó Alonso, que comenzó a sufrir graining y tuvo que adelantar el segundo repostaje: "Y después, en el segundo, hubo un error del equipo, pero eso ocurre a veces. Llevo cuatro años con ellos y no es lo habitual. Eso no me preocupa. Al final, los 6 ó 7 puntos que hemos perdido entre esta carrera, la de Magny Cours o la de Hockenheim no son importantes. Lo que ha igualado el campeonato han sido los abandonos de Hungría [por una tuerca mal fijada] y de Monza ".

Sin embargo, Alonso no esconde su preocupación porque desde que ganó el Gran Premio de Canadá, y hace de eso siete carreras, todo se le ha complicado muchísimo. "Ahora voy a Japón con la moral muy alta, pero hay que luchar contra tantos factores que a veces no puedes con todo. El campeonato está difícil, pero las cosas han cambiado poco con relación a la última carrera. Hay que seguir ganando", aseguró. Desde Montreal, los problemas se han multiplicado para él y para el equipo Renault: supresión del mass damper (equilibrador de masas), sanciones en Hungría y en Monza, dos abandonos por problemas mecánicos en las mismas carreras y la falta de evolución de su coche en comparación con Ferrari y McLaren. "Sin embargo", aceptó Alonso, "soy optimista porque ayer éramos más rápidos en seco y en mojado. Sólo que tuvimos que correr 40 vueltas sin lo uno ni lo otro".

Pat Symonds, director ejecutivo de la escudería Renault, reconoció su decepción por no haber logrado el triunfo en Shanghai. "No tenemos excusa. Era una carrera que deberíamos haber ganado porque Renault y Michelin dominaron en todas las condiciones", comentó.

Symonds explicó la secuencia de los hechos más decisivos de la prueba. "Fernando ha pilotado de forma magnífica y, cuando estaba llegando el momento del primer repostaje, nos ha hecho saber a través de la radio que sus neumáticos delanteros estaban muy gastados. De acuerdo con él y con Michelin, hemos decidido cambiarlos y conservar los de las ruedas posteriores. Rápidamente ha quedado claro que ha sido un error", admitió Symonds. "Hemos arriesgado y hemos hecho parar de nuevo a Fernando para ponerle neumáticos de seco esperando que pudiera recuperar posiciones. Entonces ha surgido un problema cuando un tornillo se ha caído de la pistola de un mecánico, pero no sabemos por qué. Fernando ha estado de nuevo fantástico y ha recuperado tiempo sobre Schumacher, pero le han faltado vueltas para poder culminar la remontada".

Alonso detiene su Renault en uno de los dos repostajes que hizo.
Alonso detiene su Renault en uno de los dos repostajes que hizo.ASSOCIATED PRESS

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