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El dúo jiennense Arquitrabe rescata un repertorio de música sefardí

Ginés Donaire

La onza de la gracia, una canción de boda de Marruecos, da título al segundo disco compacto del dúo jiennense Arquitrabe, nacido en el año 1989 con la finalidad de interpretar canciones originarias de la cultura sefardí y el romancero de tradición oral.

Arquitrabe lo forman Juan Guerrero Olid, voz e instrumentista de guitarra, epinette, zanfona, guitarrillo y rabel; y Marisi Carmona Jiménez, voz y percusión.

Estos dos juglares del siglo XXI llevan 17 años de una intensa labor de investigación por toda la geografía andaluza intentando rescatar el legado heredado de la música judeoespañola, tramas intimistas de la tradición sefardí que forman parte del patrimonio vivo de la cultura hispánica.

La onza de la gracia está compuesto por 13 temas que forman un repertorio de canciones sefardíes, y que van desde canciones de boda, a coplas, cánticas amorosas sefardíes, romances del Mediterráneo oriental o canciones líricas.

Para Joaquín Díaz, autor del prólogo del disco, lo más destacado de este repertorio es "su capacidad para superar los límites de lo etnográfico, de lo étnico, convirtiéndose en paradigma universal hermoso y rotundo". Díaz añade que este disco "descubre una de las razones de la universalidad de estas canciones: el peso de su gracia".

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"Nuestra intención es usar la música como medio de comunicación, una apuesta por la memoria para no olvidar, para recordar y para dar a conocer nuestra cultura", asegura Juan Guerrero. "Son canciones que se aprendían en la calle, en los lavaderos o en los pliegos de los ciegos", destaca Marisi Carmona.

Los romances y la música sefardí son la base principal de las composiciones de Arquitrabe. El grupo editó en 1998 su primer disco, Romancero tradicional. Al igual que este segundo, ha contado con el patrocinio de la Diputación de Jaén.

Juan Guerrero recuerda que, cuando los juglares recitaban los cantares de gesta, la gente pedía que repitieran los fragmentos más interesantes. A base de repetirlos de manera oral fueron cambiando sus contenidos.

En el siglo XV desapareció el gusto por los cantares de gesta, pero se siguieron recordando algunas partes de los mismos convertidos en romances, donde se daban noticias o se recogían leyendas populares.

Para las próximas semanas tienen programadas actuaciones en San Roque, Los Barrios, Álora, Baza, Vera y Lucena. Por otra parte, el 3 de septiembre cantarán en la judería de Segovia, como ya hicieron en días pasados en el programa Verano en la judería de Jaén. Arquitrabe es también el organizador del Festival de Música Folk de Santisteban del Puerto.

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