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Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Reinventar la modernidad

En los últimos años se han ido desdibujando las diferencias entre bienales, ferias y la propia actividad expositiva de los centros de arte. La imperiosa necesidad de generar eventos y construir espacios de visibilidad ha llevado al desarrollo progresivo de una específica topografía festivalera que, además de funcionar como escenario de presentación y análisis de las "últimas tendencias y creaciones", ha terminado por dar lugar a un auténtico circuito artístico, que alimenta un buen número de programaciones. Globos sonda es un síntoma claro de esta situación, una propuesta que tiene aire de bienal o de zona de proyectos al estilo de los Art/Unlimited de Basilea, a través de la cual, el Musac crea su particular plataforma de sondeo sobre el estado actual de la creación artística.

GLOBOS SONDA / TRIAL BALLOONS

Musac. Avenida de los Reyes Leoneses, 24. León

Hasta el 10 de septiembre

El perfil de la mayor parte de las obras presentadas se ajusta, lógicamente, a ciertas líneas de trabajo del museo desde su apertura: atención preferente hacia lo emergente, entendido aquí prácticamente en un sentido generacional (la inmensa mayoría de los artistas se sitúan entre los 30 y los 40 años); integración de diversas disciplinas -diseño, arquitectura, moda, música-; apropiación de las formas derivadas de la producción cultural y material que nos rodea; diálogo con las subculturas; incorporación de lenguajes urbanos; interés explícito por los mecanismos de apropiación, mezcla y reprogramación; inclinación por obras que exploran literalmente las capacidades sensoriales del espectador, o la fuerte presencia de métodos y referencias del arte-pop.

Aunque los comisarios plantean esta exposición como una suma de subjetividades sin un soporte discursivo explícito, no es difícil percibir en el guión del proyecto un fuerte eco de los postulados de Nicolas Bourriaud, tanto de su Estética relacional como, sobre todo, de su ensayo Post producción. Dos citas de esta obra definen bien la posición dominante en Globos sonda: "Tal como estos artistas lo practican, el mix es una actitud [...] La post producción del trabajo le permite al artista escapar de la posición interpretativa. En lugar de abocarse a un comentario crítico, es preciso experimentar" y "Reescribir la modernidad es la tarea histórica de los comienzos del siglo XXI: ni volver a partir de cero, ni quedarse atiborrado por el almacén de la historia, sino inventariar y seleccionar, utilizar y recargar". Desde los años noventa, dicha posición, con sus aspectos fuertes y sus aspectos débiles, viene empujando con evidente fuerza, y esta exposición es una muestra de ello en ambos sentidos.

Entre las obras más destaca-

bles de esta propuesta se pueden señalar: los vídeos de Katarina Löfström y Eelco Brand transformados en espacio pictórico a través del tratamiento del régimen de visibilidad y el movimiento; las excelentes piezas de Banks Violette y Steven Shearer, perfectamente interrelacionadas, que a través de la estética musical de los años setenta analizan las implicaciones sociales de los códigos de identificación cultural; las ajustadas instalaciones de Kyupi Kyupi y Superm sobre la interacción estética de las subculturas musicales; la tienda-escaparate de Josephine Meckseper sobre las complejas relaciones entre política, arte, consumo e industria; la interesante operación de transformación/transgresión del espacio del museo realizada por Juan López; los vídeos de Markus Schinwald y King / Díaz de León que exploran la conexión entre cuerpo, movimiento y subjetividad; el de Jesper Just que utiliza los códigos del cine estadounidense para confrontar el concepto de masculinidad con la saturación emocional del melodrama, o los de Smadar Dreyfus y Shahryar Nashat explorando nuestra percepción de los símbolos y relaciones de poder.

Pero junto a estos excelentes momentos, también encontramos algunas obras que o bien adolecen de una lectura demasiado simplista de la realidad o bien se prestan a un juego excesivamente ligero, tanto de apropiación como de exploración de las reacciones sensoriales del espectador.

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