Una OPA con claroscuros
Los accionistas de Telefónica Móviles vivieron ayer una jornada de sobresaltos. Los medios anunciaban desde primera hora la inminencia de una OPA de exclusión (dándose incluso precios) y la cotización de la filial de Telefónica se disparó, nada más abrirse el mercado, hasta un máximo de 11,50 euros, un 9,62% sobre su cotización de cierre del miércoles, sesión en la que ya había subido un 4,17%.
Sin embargo, la CNMV esperó hasta pasadas las 11 de la mañana para suspender las cotizaciones de Móviles y de Telefónica. Cuando se levantó la supensión, hacia las 12.15 horas, las acciones de Móviles perdieron casi todo lo ganado y finalizaron la jornada en 10,72 euros, con un alza del 2,19%. Durante el día se movieron 55 millones de títulos, cuando la media en el último año ha sido de dos millones diarios. Los cazadores de primera hora de la mañana se convirtieron en presas al cierre.
La CNMV investigará de oficio las operaciones realizadas ante las sospechas de información privilegiada.
El mercado esperaba la suspensión de la cotización, dada la celeridad que actúa la CNMV en casos de este tipo y no se explicaba el retraso. Según fuentes del organismo regulador, éste se puso en contacto con Telefónica antes de la apertura del mercado para inquirir sobre las informaciones periodísticas. "La respuesta fue que se barajaban varias posibilidades pero que, en ese momento, no había ninguna operación".
Transcurrido un tiempo, la Comisión volvió a llamar a la compañía y le instó a comunicar mediante un hecho relevante la inexistencia de una operación. "En ese momento", indicó la CNMV, "la compañía nos informó de que sí hay operación y entonces se suspendió la cotización de las dos empresas".
Fuentes cercanas a Telefónica corroboran que en el primer requirimiento informó de que no había operación prevista y sólo tras la segund allamada envió el hecho relevante (a las 11.18 horas) acerca de su intención de lanzar una OPA. Intención, puesto que aún no ha sido aprobada por los órganos de gobierno de la empresa. César Alierta, presidente de Telefónica, tenía previsto comunicarla hoy a la Comisión Delegada, y el próximo día 29 al Consejo de Administración. Pero ayer tuvo que adelantar sus planes.
