_
_
_
_
_
Crónica:LA CRÓNICA | NACIONAL
Crónica
Texto informativo con interpretación

El congreso transitorio del PP

Soledad Gallego-Díaz

La crisis del Partido Popular en Galicia no ha podido llegar en peor momento, por lo menos desde el punto de vista de los intereses de Mariano Rajoy. El líder del PP hace frente dentro de muy pocos días a un congreso que debe consolidar su liderazgo y dibujar un nuevo equipo de dirección, y se va a encontrar, quiera o no, con un encuentro perturbado por la rebelión de Ourense y por la sospecha de que el PP no tiene tan garantizadas como creía las elecciones autonómicas en Galicia.

"Fraga se presentó a sí mismo como el mejor situado para ganar las próximas elecciones en Galicia y nadie en el PP se lo discutió. Lo que menos quería Rajoy era un problema gallego justo antes del congreso, y por eso se anunció tan rápidamente que Fraga sería, de nuevo, nuestro candidato", reconoce un dirigente nacional del PP.

El congreso tendrá gran repercusión mediática, pero muchos dirigentes creen que "no saldrá nada definitivo" en cuanto a contenidos o al organigrama interno

"Todos sabemos que la desaparición de don Manuel puede llevar a una batalla interna monumental. Lo que no valoramos fue la posibilidad de que el propio Fraga fuera incapaz de mantener unido al PP gallego", añade.

Desde su punto de vista, la crisis de Ourense tendría "la mitad de la importancia que se le está dando si no fuera porque el congreso del partido está a la vuelta de la esquina".

"Lo verdaderamente importante", asegura, "es que unas elecciones anticipadas no le interesan a nadie. A ellos, los rebeldes, porque no tienen tiempo de asentar su nuevo partido, y a nosotros, porque las gallegas serían las primeras elecciones de verdad después del 14-M, y el PP no se puede permitir una derrota". Y precisa: "Desde luego, Mariano Rajoy no se puede permitir una derrota en Galicia". Los datos de las elecciones del 14-M indican que Galicia fue la comunidad en la que, proporcionalmente, se incorporó mas voto "nuevo".

Se resuelva como se resuelva la crisis gallega, el congreso del PP se plantea cada vez más como un congreso "transitorio", que deje abiertas muchas posibilidades para el futuro inmediato, tanto desde el punto de vista de la organización interna como de los contenidos.

Muchos diputados nacionales y autonómicos del PP comparten la opinión de que de este congreso "no saldrá nada definitivo". "La derrota electoral está demasiado cercana y no hemos pasado todavía por ningún proceso electoral auténtico como para saber dónde estamos realmente. En las elecciones europeas tuvimos un gran resultado y nos dieron ánimo, pero no son unas elecciones realmente útiles para un análisis en profundidad de nuestro electorado", explica un veterano analista del PP.

Puertas autonómicas

"El documento de San Millán, sobre la reforma estatutaria, por ejemplo, es un ejemplo de esa necesidad que tenemos de dejar abiertas más puertas de las que cierren", asegura otro dirigente autonómico del PP. Para él, la reunión convocada por Rajoy fue una manera inteligente de evitar que el partido y el congreso "se dispersen" discutiendo sobre el capítulo territorial y, sobre todo, de que se hagan pronunciamientos que luego sean incompatibles con la gestión de las propias comunidades autónomas que administra el PP.

"Ahora ya hay un punto de referencia y siempre podremos dirigirnos a ese documento, no sólo para encauzar la discusión, sino también para evitar interpretaciones internas, digamos, demasiado antiguas de la realidad española", explica. "San Millán permite discutir de muchas cosas y deja las manos bastante más libres de lo que parece a los presidentes de las comunidades del PP y a los responsables del partido en cada autonomía", concluye.

La dirección del PP es consciente de que el congreso nacional de los próximos días 1, 2 y 3 tendrá una importancia mediática muy grande, y de que debe dar "una imagen sólida de unidad y de ánimo". Pero también sabe que inmediatamente después, entre octubre y diciembre, se celebrarán todos los congresos regionales y que será allí donde Mariano Rajoy tendrá que demostrar realmente su liderazgo.

"La realidad es que ahora hay problemas, más o menos importantes y más o menos solapados, en casi todas nuestras organizaciones territoriales", reconoce un diputado. Y admite que será en esos congresos donde de verdad "se medirá el éxito del congreso nacional".

"El tema territorial va a permear toda la discusión política en este país en los próximos meses, y un partido como el nuestro, que gobierna algunas comunidades y que aspira a hacerse con otras, debe moverse con más cuidado de lo que algunos, precipitadamente, proclaman", comenta, por su parte, un dirigente nacional.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_