Piscinas cerradas, pese al calor final del verano
Cada año en estas fechas, cuando el calor aún aprieta en Madrid, me hago la misma pregunta. ¿Por qué están cerradas las piscinas municipales al aire libre cuando aún tenemos unas temperaturas diurnas que rondan los 30 grados? Ya sé que la mayoría de la gente, una vez empezado el colegio, ya no suele ir, pero siempre hay, y de esto estoy segura, numerosas excepciones. En el 010 me comunicaron que se cerraron todas las piscinas el día 7. Esta eficacia parece, más que exagerada, casi ridícula. Por lo menos podrían tener algunas instalaciones abiertas para los raros a los que les gusta refrescarse tras una intensa jornada laboral.
Pocas alegrías reserva esta ciudad ya para sus gentes, habrá que irse a Barcelona y no depender nunca jamás de la Consejería de Deportes, que tan poca imaginación demostró en los últimos años.