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UNA INVESTIGACIÓN POLÉMICA

Sanidad asegura que no ha autorizado ninguna investigación con células madre

Bernat Soria: "Son los mismos del PP que me llamaron a mí asesino"

El Ministerio de Sanidad asegura que ni el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) ni la Consejería de Sanidad valenciana han solicitado autorización alguna para experimentar y crear líneas celulares a partir de embriones humanos. El resultado de estos ensayos fue hecho públicos ayer con la presencia, entre otros, de la ex ministra de Sanidad del PP Ana Pastor. Por su parte, el científico Bernat Soria, el primero que intentó trabajar con células madre y todavía espera el permiso para hacerlo, se mostró ayer indignado por el marco político del anuncio: "Son los mismos que me llamaron a mí asesino", declaró.

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En un documento del Centro Nacional de Trasplantes y Medicina Regenerativa (Cenatmer) al que ha tenido acceso este periódico se afirma que "no ha tenido conocimiento oficial ni oficioso de esta investigación". Según esta nota, el centro ha recibido tres "proyectos", dos del IVI y uno de la consejería de Sanidad, que "en ningún momento establece que se esté trabajando con material preembrionario, y por supuesto no constituye una solicitud para la autorización de ninguna línea de investigación".

Según el texto, durante una visita realizada en junio por responsables del centro a los científicos valencianos, "en ningún momento se reconoció que se estuviera investigando en España con este material [líneas celulares de origen embrionario]".

En la misma línea, el Ministerio de Sanidad manifestado a última hora de ayer su "sorpresa" por el anuncio, sobre todo cuando el PP, durante su etapa de Gobierno, "aprobó una reglamentación sobre células madre claramente restrictiva, al poner numerosos obstáculos a la investigación en estos ámbitos".

Sanidad afirmó que había conocido la noticia "por los medios de comunicación", recordó que está pendiente de elaborar una Ley de Investigación en Biomedicina y afirmó que "no tiene constancia de que se hayan respetado" los "criterios éticos y responsables que deben ser comunes en todo el territorio".

Por el contrario, el consejero de Sanidad de la Comunidad Valenciana, Vicente Rambla, dijo ayer que en marzo había firmado un acuerdo con la entonces ministra de Sanidad, Ana Pastor, para hacer del futuro Centro Superior en Alta Tecnología Científica para la Investigación en Biomedicina y Trasplantes de Tejidos y Órganos de la Comunidad Valenciana (CSAT) -que dirigirá Rubén Moreno, alto cargo de Sanidad durante el mandato de Celia Villalobos (PP)- un nodo de investigación de la red propuesta por el Cenatmer.

Según Rambla, el convenio lo firmaron él y Rafael Matesanz, director del Cenatmer, y ambos acordaron impulsar la constitución del centro de investigación en medicina regenerativa de Valencia "como nodo de investigación del Cenatmer, que quedará supeditado a la creación de la Fundación para la Investigación del Centro Nacional de Medicina Regenerativa y Trasplantes". Sin embargo, el convenio no entró al detalle de la financiación, una cuestión pendiente de resolver. Literalmente el escrito incluye un párrafo que señala que "por sí solo, no comporta obligación económica alguna para las partes". Y añade: "Los compromisos de financiación habrán de ser determinados y sólo podrán ser materializados a través de convenios específicos de desarrollo".

Bernat Soria, el científico español que más ha luchado porque se permita el trabajo con células madre embrionarias y que tuvo que trasladar su trabajo en la Comunidad Valenciana (en Alicante) a Singapur primero y después a Andalucía, se mostró ayer desconcertado ante el anuncio realizado en Valencia, aunque se apresuró a felicitar al equipo de Simón "a la espera de que se confirme dentro de seis meses lo anunciado hoy".

El desconcierto de Soria se debe al carácter político del anuncio, con la presencia incluso de la ex ministra Ana Pastor, y a que los científicos valencianos están ligados a un centro impulsado por el PP que dirigirá Rubén Moreno, que fue quien amenazó con medidas disciplinarias en 2001 a Soria cuando éste manifestó su deseo de aplicar a células madre embrionarias humanas las investigaciones que había llevado a cabo con ratones para curar enfermedades como la diabetes.

Permiso bloqueado

"Estos señores me llamaron a mí asesino en televisión", recordó ayer Soria, quien se pregunta si el grupo de Simón tiene los permisos pertinentes. "Yo sigo bloqueado porque no me dan los permisos y ahora veo que el Gobierno anterior, mientras nos prohibía a los demás trabajar, se lo permitía a otros. Está claro que me ha faltado el carnet del PP".

Este investigador cree que el Gobierno anterior ha demostrado su parcialidad , que la ley que hicieron es "un campo minado" y que el Gobierno actual debe cambiarla y dar los permisos necesarios a Simón y a todos los grupos que quieran trabajar en este área para que "no tengan que sufrir lo que yo sufrí".

Bernat Soria (izquierda) y Rubén Moreno.
Bernat Soria (izquierda) y Rubén Moreno.

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