_
_
_
_

El alcalde hace balance triunfal de su primer año y la oposición dice que "vende humo"

Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid, hizo ayer un balance triunfal de su "primer año de gobierno", a pesar de que ese aniversario no se cumple hasta el próximo 14 de junio. Sí se cumplía un año de las elecciones municipales que dieron la victoria al PP, y Ruiz-Gallardón aprovechó la ocasión para rodearse de todo su equipo y convocar un acto de autobombo en el Círculo de Bellas Artes de la capital.

En un discurso de casi 45 minutos, tras el que no admitió preguntas, el alcalde admitió que el gobierno municipal que él dirige "se ha equivocado muchas veces" -aunque no citó ni un solo caso-, pero subrayó que en este año "se han puesto los cimientos" de un programa electoral, el suyo, que es "el más ambicioso que ha concurrido nunca a unas elecciones".

Después, fue desgranando los logros de cada concejalía en estos primeros 12 meses, aunque en ese repaso incluyó medidas que no llegarán hasta 2005 -como la creación de un servicio de biblioteca en el metro-, otras que se pondrán en marcha este verano -la colocación de un bordillo para separar el carril-bus en algunas calles- y otras que no estarán listas antes de final de año -como los planes de renovación de los grandes parques de la ciudad-. Incluso citó un proyecto, el de la conversión del viejo matadero de Legazpi en un gran centro de creación artística, cuyo plazo de ejecución está previsto para 2012.

La elaboración del reglamento del pleno municipal para adaptarse a la Ley de Grandes Ciudades, la elaboración de los proyectos previos para la reforma de la M-30, la campaña contra la prostitución en la calle de la Montera y, sobre todo, los avances en materia de movilidad -corte al tráfico de la Casa de Campo y del paseo de Camoens, restricciones en Gran Vía, colocación de radares en la M-30- fueron destacados por Ruiz-Gallardón como hitos de su primer año al frente del Ayuntamiento.

La oposición respondió acusando al alcalde de no haber hecho nada en 12 meses. Trinidad Jiménez (PSOE) dijo que Ruiz-Gallardón "vende humo" y que su gestión ha sido "un auténtico fiasco". Inés Sabanés (IU) le dio un "suspenso rotundo" y afirmó que su gobierno se ha caracterizado por el "despilfarro" y la "falta de transparencia".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_