_
_
_
_
_

La licencia de obras del hospital de Sant Pau no exigía suspender la asistencia médica

"Los papeles estaban en regla y autorizaban que se trabajase en el edificio sin necesidad de paralizar la asistencia". Así lo expresó la consejera de Sanidad, Marina Geli, durante una visita que realizó ayer a los nueve heridos que continúan ingresados en el hospital de Sant Pau tras desprenderse la cúpula del pabellón de ginecología el lunes pasado.

La empresa que realizaba las obras en el pabellón afectado, SAPIC, "contaba con el permiso correspondiente del Ayuntamiento de Barcelona". Geli aseguró que se están "investigando las causas del accidente" y que el informe puede estar disponible en el plazo de una semana.

Mientras tanto, las visitas de ginecología se están realizando en dispensarios de otros pabellones que quedaron libres tras el traslado de sus servicios a las nuevas instalaciones del hospital de Sant Pau. La consejera manifestó que se podría avanzar el traslado del servicio de ginecología, previsto para dentro de cinco meses, al nuevo hospital, que está situado detrás del actual complejo sanitario.

De los nueve hospitalizados, una mujer continúa ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos por rotura de bazo y otra se encuentra en la Unidad de Semicríticos por una contusión torácica. Ambas evolucionan favorablemente. El pronóstico de los otros siete heridos es leve. El alcalde de Barcelona, Joan Clos, también visitó ayer a los heridos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_