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LOS PLANES DEL GOBIERNO

Un gran debate sobre el futuro de la escuela

La escolarización de inmigrantes y el impulso de la lectura y el bilingüismo serán los principales retos

La educación es una de las grandes prioridades del nuevo Gobierno", no se ha cansado de repetir en los últimos meses el nuevo presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero. Su primera reunión educativa, ha prometido, será con la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). Su apuesta por el apoyo a este colectivo ya la materializó en sus propuestas electorales relacionadas con la reforma de la Ley Orgánica de Universidades (LOU), impulsada por el PP, que el nuevo Gobierno se propone cambiar siguiendo una línea paralela a la dibujada por los rectores en sus peticiones. Al lado de la ministra de Educación, María Jesús San Segundo, el encargado de liderar las iniciativas en materia universitaria será el secretario de Estado de Universidades y Ciencia, Salvador Ordónez.

Pero el nudo gordiano de esta legislatura, al menos en su primera mitad, es sin duda el cambio de la Ley Orgánica de Calidad de la Educación (LOCE). El secretario general de Educación, Alejandro Tiana, se ocupará de esta parte.

El equipo de San Segundo se propone empezar por abrir un gran debate educativo, tal y como ha prometido José Luis Rodríguez Zapatero, en el que participen todas las comunidades autónomas y todos los agentes sociales y educativos. El precedente más cercano en esta línea es el Debate para el Futuro de la Escuela abierto en Francia, donde se acaban de presentar las primeras conclusiones.

También promovió un debate similar la Conferencia Nacional de Educación de Cataluña a finales de los noventa. Pero, tradicionalmente, los socialistas españoles han optado por esta vía. Para hacer la Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE), de 1990, abrieron un debate que se materializó en cinco libros de conclusiones. En esta ocasión, presumiblemente, los tiempos van a ser muy distintos.

La primera medida anunciada relacionada con la LOCE es la paralización de la aplicación de esta ley (iniciada este curso académico). Se hará en uno de los primeros Consejos de Ministros mediante la modificación del real decreto de calendario de la LOCE. El paro durará dos años a lo sumo, el plazo en que el Gobierno prevé debatir, pactar, reorganizar y aprobar la nueva legislación, en un ritmo que ya le viene en cierto modo marcado al parar unos cambios a medio aplicar.

El propósito de Educación es establecer su trabajo sobre tres pilares:

-El planteamiento de los cambios desde el análisis positivo de la evolución que ha vivido la educación en las últimas décadas y, a partir de esta perspectiva, buscar solución a los problemas surgidos.

- La reforma de la legislación desde unas bases y procedimientos distintos a los utilizados por el PP.

-La puesta en marcha de iniciativas que permitan pulsar la opinión del máximo número de personas y de todos los colectivos a los que afecta la educación (familias, profesores, alumnos, sindicatos o empresas).

Pero el Gobierno quiere promover además nuevos proyectos y buscar soluciones para problemas educativos que trascienden al contenido de las leyes, tales como el fracaso escolar. Las líneas de trabajo generales de las que parte se resumen en cuatro: escolarización de los inmigrantes, impulso de la lectura, inicio del bilingüismo en las escuelas públicas y fomento de las nuevas tecnologías.

En Universidad, la principal medida será cambiar el sistema de selección del profesorado funcionario mediante unas pruebas de habilitación nacional, introducidas por la LOU, por un sistema basado en la acreditación por currículo y méritos académicos. Además se modificará el carácter de fundación privada de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) para convertirla en un organismo público independiente. El reto mayor de la política universitaria será cumplir con la promesa de multiplicar todo tipo de becas y ayudas a los estudiantes.

En cualquier caso, en la apuesta económica que decida realizar el nuevo Gobierno se verá el grado de relevancia que le otorgue a la educación.

La ministra de Educación, María Jesús San Segundo.
La ministra de Educación, María Jesús San Segundo.GORKA LEJARCEGI

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