Los accidentes de tráfico hacen perder 25.000 años de vida potencial cada año

En Cataluña se pierden cada año 25.000 años de vida potenciales por culpa de los accidentes de tráfico. Esta cifra es una de las que pone sobre la mesa el Informe del riesgo 2003 en el capítulo dedicado a las amenazas viarias. El demoledor dato resulta de multiplicar la cifra de 812 personas que murieron en las carreteras catalanas durante el año 2002 por la media de años que hubieran vivido hasta superar la esperanza de vida de los catalanes, teniendo en cuenta que la edad media de los fallecidos fue de 30,7 años.

Este dato sobre el riesgo viario muestra, como también ocurre en los indicadores de riesgo laboral, que pese a que los accidentes descienden en los últimos años, sus consecuencias son cada vez más graves. Así, durante el año 2002 el número de accidentes de tráfico descendió el 20%, pero la cifra de muertos aumentó el 13%. En el caso de los siniestros laborales, durante el mismo periodo bajaron el 2,69%, mientras que los fallecidos se incrementaron el 20,8%, según los datos que ofrece el estudio.

"Todas las cuestiones de salud avanzan de forma razonable y, en cambio, permanecen lacras como los riesgos viarios y los laborales", lamentó ayer el director del estudio, Narcís Mir. "Cualquier sociedad sana debería rebelarse y considerar el precio del desarrollo, porque parece que el neoliberalismo se ha instalado en las carreteras", agregó.

Sobre los riesgos asociados a la salud de la población, el informe destaca que la esperanza de vida sigue creciendo, pero alerta sobre la emergencia de problemas asociados a patologías del trabajo y nuevas enfermedades ligadas a trastornos degenerativos, principalmente demencias, y al envejecimiento.