La fatiga inexplicable puede ser un síntoma anticipatorio del infarto en las mujeres
Las afectadas pueden sentir señales premonitorias hasta un mes antes de la crisis cardiaca
Las diferencias de sexo son especialmente notorias en la patología cardiovascular. Diversos estudios han puesto de relieve en los últimos años que las mujeres y los hombres tienen diferentes probabilidades de morir tras un infarto. Las hormonas proporcionan hasta la menopausia cierta protección a las mujeres contra el infarto, pero cuando los padecen, las probabilidades de morir son el doble que las de los hombres. En conjunto, sin que se sepa a ciencia cierta por qué, el infarto de miocardio es más grave y produce más complicaciones y mayor mortalidad en las mujeres que en los hombres.
Entre los factores involucrados están el mayor retraso de las mujeres en acudir al hospital, la mayor debilidad del corazón femenino tras la falta de protección de los estrógenos y la peor asistencia médica que reciben. A todo esto, una nueva investigación realizada con mujeres que habían padecido un infarto ha añadido otro factor diferencial: las afectadas habían experimentado síntomas poco identificables como síntoma de afección cardíaca, como fatiga inexplicable o problemas para dormir hasta un mes antes de la crisis. La investigación, publicada en la revista Circulation, sugiere la posibilidad de actuar sobre estos síntomas anticipatorios para prevenir el ataque y reducir la mortalidad.
Trastornos del sueño, problemas al respirar y ansiedad son algunos de los signos de aviso
"Dado que las mujeres reconocieron que habían experimentado señales premonitorias más de un mes antes del ataque al corazón, podría dar tiempo de tratar estos síntomas y posiblemente de demorar o evitar la crisis cardiaca", afirma Jean C. McSweeney, autora principal del estudio y profesora de Enfermería de la Universidad de Arkansas (EE UU).
Los investigadores estudiaron a 515 mujeres de una edad media de 66 años a las que se les había diagnosticado ataque al corazón y a las que se había dado de alta. Para evaluar los síntomas que podían indicar un ataque inminente al corazón, los investigadores utilizaron un cuestionario que incluía 33 señales premonitorias (síntomas que aparecían o cambiaban de intensidad o frecuencia antes del ataque al corazón, se hacían intermitentes antes de la crisis y desaparecían o volvían a los niveles anteriores después del ataque) y 37 síntomas agudos (los que aparecían con el ataque al corazón y no se resolvían hasta que las pacientes recibían tratamiento), que las mujeres habían reconocido en estudios anteriores.El 95% de las mujeres reconocieron haber tenido síntomas nuevos un mes antes de su ataque al corazón. De forma retrospectiva, esto les hacía creer que estos síntomas estaban relacionados con el posterior ataque. Las señales premonitorias más comunes antes del ataque fueron fatiga inusual en el 70% de los casos, trastornos del sueño en el 48%, insuficiencia respiratoria en el 42%, indigestión en el 39% y ansiedad en el 35%.
Sólo el 30% de las mujeres estudiadas mencionó molestias en el pecho tras el ataque. Y describieron estas molestias como malestar, tensión y presión, pero no dolor, según McSweeney. "Hay que enseñar a las mujeres que la aparición de síntomas nuevos puede estar asociada a la enfermedad de corazón y que tienen que pedir atención médica para determinar la causa de los síntomas, especialmente si tienen riesgos cardiovasculares conocidos, como consumo de tabaco, tensión alta, colesterol elevado, diabetes, exceso de peso o historial familiar de enfermedad coronaria", afirma.
"La falta de un dolor significativo en el pecho podría ser un motivo importante por el cual las mujeres tienen más ataques al corazón no reconocidos que los hombres, o de que sean diagnosticadas erróneamente y dadas de alta en urgencias con más frecuencia que ellos, afirma McSweeney. "Muchos expertos clínicos siguen considerando que el dolor de pecho es el síntoma principal del ataque al corazón". Los síntomas agudos más frecuentes, y que en algunos casos son los mismos que las señales premonitorias, fueron insuficiencia respiratoria (el 58%), debilidad (el 55%), fatiga inusual (el 43%), sudores fríos (el 39%) mareos (el 39%).
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