Richard Wollheim, filósofo del arte
Richard Wollheim, filósofo que sintetizó la filosofía analítica, el psicoanálisis y el estudio de la pintura para realizar análisis estéticos considerados entre los más profundos de la posguerra, falleció el pasado martes en su casa de Londres a los 80 años.
La causa del fallecimiento fue una insuficiencia cardiaca, según una nota publicada por el departamento de filosofía de la Universidad de California en Berkeley. El profesor Wollheim fue director del departamento entre 1998 y 2002. Su destreza intelectual, a veces cercana a la travesura, la sugieren obras que van desde la muy respetada biografía de Freud hasta una novela que fue bien recibida, pasando por un examen de las emociones humanas que algunos críticos consideran la base de la teoría general en una cuestión olvidada por los filósofos.
Pero donde tuvo una mayor influencia, algo también inusual para un filósofo analítico, fue en el arte. Acuñó el término "minimalismo" en su ensayo de 1965 Minimal Art. En realidad no se refería a los nuevos artistas, a los que pronto se llamaría minimalistas, que entonces comenzaban a surgir, sino a las pinturas monocromáticas y a la utilización que Marcel Duchamp hacía de objetos ordinarios, como el famoso urinario, que presentaba como arte.
Un logro mayor y más conocido fue el desarrollo de un nuevo enfoque y vocabulario para experimentar el arte. Wollheim, desarrollando las ideas de Wittgenstein y Freud, sostenía que el arte sólo podía comprenderse dentro de su contexto total, desde la historia a la naturaleza de la comunidad circundante, pasando por las disposiciones emocionales y las necesidades físicas y psíquicas de artistas y espectadores.
Su idea era empezar a observar una superficie pintada de la misma forma que uno podría intentar encontrar un rostro en las nubes o de la forma en que podría, como Leonardo, visualizar paisajes en las manchas de una pared. Después, trataba de interpretar las intenciones del artista. Wollheim creía que para revelar el significado de un cuadro había que reconstruir la actividad creativa que lo produjo.
Aseguraba que esto era posible porque artistas y espectadores compartían una naturaleza humana universal. En La pintura como arte (Visor Distribuciones, 1997), una colección de conferencias pronunciadas en la National Gallery of Art de Washington en 1984, denominó a dicha comunión "ver el interior".
Su método personal de "ver el interior" se hizo célebre por su singularidad. En las conferencias decía: "Desarrollé una forma de ver cuadros que consumía una enorme cantidad de tiempo y era profundamente gratificante. Porque llegué a reconocer que a menudo hace falta pasar aproximadamente una hora ante un cuadro para que se desvanezcan las asociaciones errantes o los errores de percepción motivados; y sólo entonces, al pasar casi la misma cantidad de tiempo mirándolo, puede dejarse que el cuadro se revele a sí mismo tal como es".
Richard Arthur Wollheim nació en Londres el 5 de mayo de 1923. Se graduó en la Westminster School y se licenció en el Balliol College de Oxford. Durante la II Guerra Mundial sirvió en la infantería en Francia y fue brevemente capturado por los alemanes. Dejó el ejército con la graduación de capitán.
Desde 1949 hasta 1982 fue profesor de filosofía en el University College de Londres. Después enseñó en Estados Unidos, primero en Columbia, desde 1982 a 1985, y posteriormente en Berkeley, hasta su jubilación en 2002. De 1989 a 1996 dividió su tiempo entre Berkeley y la Universidad de California en Davis. Sus libros recibieron críticas variadas, pero nunca pasaron inadvertidos. Su novela, A Family Romance (1969), también mostró sus conocimientos psicológicos.
A Wollheim le sobreviven su esposa, la ceramista Mary Dan Lanier; la hija de ambos, Emilia, y dos hijos de su primer matrimonio, Bruno y Rupert.-
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