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Crónica:GOLF | Open de Madrid
Crónica
Texto informativo con interpretación

González se santigua, reza y gana

El argentino logra su segundo triunfo en el 'tour' europeo encomendándose a Dios, dijo, para resistir la presión

Ricardo González se santiguó y aguantó la presión. El golfista argentino, de 34 años, emergió el sábado, cuando, bajo la lluvia, firmó la mejor tarjeta del día: 66 golpes. Ayer la superó, con 65, y se mantuvo en la cabeza del Open de Madrid, aunque rezando hasta el hoyo final, en el que por milímetros no consiguió forzar el desempate el australiano Nick O'Hern. González ya había terminado su vuelta y cruzaba los dedos muy próximo a las vallas que delimitan el green del 18 del Club de Campo. Previamente, había hecho un bogey en ese mismo hoyo tras caer en un inundado bunker.

"Miré al cielo en el hoyo 14 y le pedí a Dios que me ayudara", dijo González en un tono entre místico y emocionado tras recoger el cheque de 233.330 euros por su victoria.

La historia del domingo fue de seis jugadores. Algunos, viniendo de atrás. Otros, descendiendo. Todos, igualados arriba, con 13 golpes bajo par (-13) a falta de seis hoyos para el final. Entre ellos, Sergio García. Un emocionante espectáculo seguido por un considerable número de aficionados, especialmente al español, a quien acompañaba un séquito de cerca de 300 personas a pesar de lo desapacible del tiempo reinante.

En plena tromba de agua, El Niño mostró su cara más brillante. Ésa que es capaz de culminar en el green la excelente ventaja que supone dejar la pelota unos 30 metros más cerca de la bandera que el resto de los competidores. El castellonense, que partía con siete golpes de desventaja respecto al hasta entonces líder, el inglés Paul Casey, desaceleró su brillante juego a partir de que saliera el sol y enterró con dos bogeys consecutivos sus opciones de triunfo. Evidentemente, falló con el putter.

Y es que la segunda parte del recorrido de ayer de los últimos cuatro partidos (tres jugadores en cada uno) fue una historia de nervios, oraciones a la providencia y desconcierto en el clima. De una fuerte lluvia que inundó los bunkers, embarró el rough y dejó los greenes blandísimos a un resplandeciente sol que saludó los cuatro últimos hoyos al paso de los grandes favoritos.

Padraig Harrington, Paddy, el irlandés tranquilo que siempre recuerda lucir algún trébol característico de su país en su indumentaria, también peleó por la victoria hasta casi el final. Compañero de partido de García, estuvo magnífico en todas las facetas del juego y fue uno de los que dejó una sensación de solidez más acusada.

Justo lo contrario que el bisoño Casey, que se mantuvo al frente durante 63 hoyos y se hundió en la primera parte de su vuelta. También empezó a perder su cómodo colchón en la jornada del sábado, cuando se empeñó en finalizar su recorrido a pesar de que ya no había luz y firmó el par del campo.

González, nacido en la ciudad argentina de Corrientes y aficionado al fútbol y al más sosegado deporte de la pesca, ganó así su segundo torneo del circuito europeo. Se estrenó en 2001 venciendo en el Masters de Suiza. Evidentemente, también es un creyente convencido.

Clasificación final: 1. R. González (Arg.), 270 golpes (-14). 2. P. Casey (Ing.), P. Harrington (Irl.), N. O'Hern (Aus.), y M. Olander (Sue.), 271. 6. S. García, 273. 10. G. Fernández-Castaño, 274. 13. J. M. Olazábal, 275.

Ricardo González celebra su triunfo en Madrid.
Ricardo González celebra su triunfo en Madrid.REUTERS

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