Los socialistas sufren dos ataques callejeros en Andoain al mes de ganar la alcaldía

Los socialistas de Andoain (Guipúzcoa) temían nuevos ataques de los violentos tras arrebatar la alcaldía a Batasuna en las pasadas elecciones, y no se equivocaron. Simpatizantes de ETA les amenazaron ayer con la colocación de dos artefactos caseros que causaron escasos daños materiales: el primero estalló en el exterior de la vivienda de la concejal Antonia Landa, el segundo, en la Casa del Pueblo. El vicesecretario del PSE de Guipúzcoa, Miguel Buen, no descarta que los sabotajes busquen disuadirles de destapar las irregularidades que han detectado tras llegar al poder.

"Se están descubriendo demasiadas maniobras y chapuzas y demasiadas connivencias con el terrorismo que se han producido en los últimos cuatro años", dijo el dirigente socialista guipuzcoano Miguel Buen. Batasuna gobernó desde 1999, cuando se hizo con la alcaldía por 63 votos, hasta 2003. "No podemos concretar todavía", continuó, "pero ha habido subvenciones a grupos que no serán terroristas, pero sí están en la órbita de los terroristas y sí han apoyado y no han condenado a los terroristas", señaló. Y sugirió que los ataques, que sorprendieron a los socialistas de madrugada, pueden estar relacionados con estos hallazgos.

El primero hizo sonar las alarmas a las 2.40 en la vivienda de Landa. Varios desconocidos colocaron junto a un balcón de su casa un artefacto incendiario formado por dos garrafas de gasolina y dos petardos que actuaron como iniciadores. El estallido provocó un pequeño incendio que afectó a la parte exterior del balcón. Treinta y cinco minutos más tarde, otro artefacto similar hacía explosión ante la sede socialista, en la calle Arrate. Esta vez los petardos no llegaron a incendiar las garrafas y su estallido sólo causó un ligero abombamiento de la persiana del local.

Aunque este nuevo episodio de kale borroka apenas causó daños materiales, supuso un duro golpe para Andoain, un municipio especialmente azotado por el terrorismo de ETA y la violencia callejera de sus seguidores durante la pasada legislatura.

ETA asesinó en 2000 en esta localidad al columnista de El Mundo y fundador del Foro Ermua José Luis López de Lacalle y en febrero de este año al jefe de la policía local y miembro de ¡Basta Ya! Joseba Pagazaurtundua.

Desde la ruptura de la tregua de ETA, en diciembre de 1999, el terrorismo callejero se cebó con los socialistas, con amenazas y ataques a sus coches y viviendas, en una campaña que alcanzó incluso al portavoz local del PNV, Mikel Arregi. El ambiente era tan asfixiante que José Antonio Pérez Gabarain, quien recuperó la alcaldía en las elecciones municipales del 25-M, respondió así cuando este periódico le preguntó hace un mes por la gran asignatura pendiente de la localidad: "Lograr un clima de convivencia".

Condena general

Los ataques de ayer fueron condenados por todas las instituciones y partidos, a excepción de la ilegalizada Batasuna. El portavoz municipal del PSE, Estanis Amutxastegi, víctima de más de un ataque, se dirigió a Juan José Ibarretxe y pidió "a mi lehendakari" que "se pare a pensar un poco", que en vez de impulsar su plan "se centre, sobre todo y ante todo, en erradicar esta falta de libertad que tenemos algunos en este país".

El Gobierno vasco rechazó ayer "con firmeza", a través de un portavoz de la presidencia, los ataques perpetrados en las horas anteriores por ETA y su entorno contra la vivienda de la concejal socialista Landa, la Casa del Pueblo de Andoain y los juzgados Estella. El mismo portavoz criticó el "inútil propósito" de la organización terrorista por conseguir algún beneficio con este tipo de atentados. Y recordó a ETA que la mayoría de la ciudadanía le exige que "abandone la violencia".