Amor Brujo, el refugio del pop-rock madrileño
A pesar de que Madrid ha creado una escuela musical con un sonido característico y propio (Antonio Vega, Los Secretos, Nacha Pop, Patacho, Mamá, Quique González...), pocos bares quedan en la ciudad que se dediquen casi por entero a ese pop de sabor castizo, guitarras limpias pero rabiosas y contundencia rockera. Amor Brujo es uno de ellos, y puede que todo sea porque su responsable, Fernando de Diego, fuera músico de aquella primera generación que lo puso en marcha. No en vano, en los ochenta hizo carrera en solitario tras dejar al grupo Raquel.
Pero no hay nostalgias. El lugar es un moderno local de copas dividido en dos plantas. La de arriba, nada más entrar, es espectacular. Las paredes están pintadas de un fresa, casi rojo, chicle, y en medio se alza una amplia mesa de billar, siempre muy concurrida con desafiantes y expertos jugadores.
La de abajo es la de la música en directo, la del escenario. La pared es azul, y del techo hay colgado un piano. Artistas afines al pop-rock madrileño suelen ser los que lo ocupan, sin desdeñar nunca a grupos de funk, fusión, cantautores, músicas del mundo o aflamencados. Casi a diario hay actuaciones y los sábados una energética jam session capitaneada por el propio De Diego al frente de un combo al que hace llamar La Banda del Bar.
Las dos plantas pueden funcionar por separado, pues los martes, por ejemplo, mientras la de arriba solo sirve copas y música enlatada, en la de abajo se imparten clases de baile de salsa.
Amor Brujo. Príncipe de Vergara, 225. Teléfono 91 4581894. Abierto a diario de 22.00 a 03.30; viernes y sábado, hasta las 5,30. Entrada gratis. Consumiciones: cervezas y refrescos, desde 2,50 euros; combinados, desde 4,50 euros.
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