Prisión para el chófer del camión en el que murieron cuatro inmigrantes
El juez ve indicios de su participación en el traslado clandestino
El conductor del camión donde fueron hallados este lunes en Villabona (Guipúzcoa) los cadáveres de cuatro inmigrantes marroquíes permanece desde ayer en la cárcel de Martutene. El juez de Tolosa, tras cuatro horas de interrogatorio, no creyó su testimonio y ordenó su ingreso en prisión sin fianza. Está acusado de un delito de homicidio por imprudencia y podría enfrentarse a otro de tráfico ilegal de trabajadores extranjeros.
El camionero, de 28 años y nacionalidad marroquí, no logró despejar ayer ante el juez de guardia de Tolosa todas las dudas acerca de su implicación en el traslado clandestino de los cuatro magrebíes. Según su versión, el lunes a las 18.15, después de 44 horas de viaje, detuvo el camión en una gasolinera de Villabona tras escuchar unos ruidos extraños en el remolque. Pidió a los empleados de la estación de servicio que avisaran a la policía para revisar la carga. Tras romper el precinto, los agentes de la Ertzaintza encontraron en el tráiler los cuerpos sin vida de cuatro personas que desprendían un fuerte hedor. Posteriormente fueron identificados como cuatro varones marroquíes de entre 23 y 28 años.
La policía vasca no pudo especificar ayer si los cuatro norteafricanos muertos se colaron en el camión en el lugar de origen -el vehículo, cargado con cajas que contenían ropa, partió el sábado a las 21.30 de Casablanca con destino a París- o lo hicieron en otro punto de la ruta. Ahora bien, sí ha confirmado que la puerta lateral del remolque hermético (tipo frigorífico) no llevaba los precintos obligatorios de un transporte TIR cuando los ertzainas fueron a romper el sello.
Tráfico de personas
El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Tolosa tomó declaración al conductor durante cuatro horas y dictó su ingreso en prisión preventiva sin fianza bajo la acusación de homicidio por imprudencia grave. El chófer fue asistido en el interrogatorio por una abogada de oficio de Guipúzcoa, aunque la empresa transportista para la que trabaja le facilitará un letrado particular durante el juicio.
El juez no ha encontrado creíble el testimonio del camionero porque contiene contradiciones con algunas de las pruebas recogidas durante las diligencias por la policía vasca, y ha apreciado indicios de su participación en los hechos, por lo que no queda descartado que se enfrente también a un delito de tráfico ilegal de trabajadores extranjeros. Mientras el camionero permanece en prisión, la Ertzaintza continúa con la investigación para determinar su grado de participación en los hechos.
Según el departamento vasco de Interior, los cuatro inmigrantes fallecidos viajaron dentro del remolque en unas condiciones infrahumanas durante un largo periodo de tiempo. Los jóvenes magrebíes, a quienes les fueron practicadas las autopsias el martes, murieron por asfixia y deshidratación, sometidos a elevadas temperaturas en un espacio reducido y con muy poco oxígeno. Los ertzainas no encontraron restos de alimento ni de agua durante el registro.
La Embajada de Marruecos se encargará de repatriar los cadáveres.
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