_
_
_
_

Dos detenidos durante un altercado entre vendedores ambulantes y policías locales en el centro de Granada

Dos personas fueron detenidas la noche del jueves en el transcurso de un altercado callejero en el centro de Granada en el que intervinieron unos 50 inmigrantes de color y una veintena de policías. La trifulca comenzó cuando dos agentes de la Policía Local requirieron a tres vendedores ambulantes originarios de Senegal para que les mostraran la autorización municipal

Dos personas fueron detenidas la noche del jueves en el transcurso de un altercado callejero en el centro de Granada en el que intervinieron unos 50 inmigrantes de color y una veintena de policías. La trifulca comenzó cuando dos agentes de la Policía Local requirieron a tres vendedores ambulantes originarios de Senegal para que les mostraran la autorización municipal y sus documentos identificativos. La disputa creció hasta adoptar el aspecto de un tumulto. Dos agentes necesitaron asistencia médica en un hospital.

José Antonio Aparicio, teniente de alcalde socialista, lamentó ayer el incidente que atribuyó a una 'minoría que actúa violentamente' y alertó contra cualquier interpretación de tendencia xenófoba. El incidente comenzó en Puerta Real, hacia las diez de la noche, cuando una pareja de agentes requirió los permisos municipales a tres personas que vendían bisutería y artículos de cuero. Según la versión municipal, los vendedores se resistieron incluso a mostrar su documentación personal. Uno de ellos huyó a pie cuando la discusión se transformó en una disputa con insultos y empujones.

Conforme aumentaba la crispación decenas de personas de color, seguramente compatriotas que viven también de la venta ambulante, acudieron al lugar y secundaron la discusión. Los agentes, al ver el cariz que tomaba la situación, pidieron ayuda a la central de Policía.

Las mayoría de las unidades disponibles, con las sirenas y las luces de emergencia encendidas, llegaron de inmediato al lugar del incidente, lo que aumentó el clima de hostilidad y confusión. Los agentes intentaron crear un cinturón de seguridad en torno al lugar de donde partió el conflicto. La discusión y los insultos y empujones duraron hasta cerca de las once de la noche.

La Policía Local consiguió entablar una conversación con dos personas que se presentaron como portavoces del resto de los inmigrantes. Tras un largo cambio de impresiones consiguieron calmar los ánimos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La Policía Local, como ha ocurrido en otros casos de conflictos callejeros, requirió la presencia de agentes adscritos al Cuerpo Superior de Policía, pero sólo acudió una unidad a bordo de un vehículo en el que viajaban dos agentes. Por si fuera poco, a las personas a quienes supuestamente competía el incidente se sumaron los espontáneos que a esa hora paseaban por el centro de la ciudad. Unos optaron por abuchear a los policías y otros por criticar a los inmigrantes.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_