El Decano saca pecho
El Recreativo, el club español más antiguo, sólo ha estado un año en la máxima categoría, a la que ahora regresa gracias a su defensa
Lucas Alcaraz, de 35 años, entrenador del Recreativo, todavía insistía a finales de marzo en que había que estar ojo avizor para que el equipo alcanzara su objetivo de este curso: la permanencia. Y lo decía pese a que el 6 de noviembre, tras la victoria en El Plantío frente al Burgos, el Decano del fútbol español había alcanzado el tercer puesto en Segunda. Desde aquel día nunca bajó del quinto lugar.
Alcaraz, que ha vivido su segunda temporada en el Recre, es un técnico que se marca objetivos inmediatos. Sólo piensa en el siguiente partido. Así ha llegado el Decano, paso a paso, a la Primera División. Granadino, hijo de Felipe Alcaraz, diputado por Izquierda Unida, está convencido de que un equipo se hace fuerte desde la solidez defensiva. Recientemente, comentó con unos amigos, en un bar, las palabras del seleccionador español, José Antonio Camacho, el día 8 en el Foro de As: 'Si se defiende bien, los jugadores del ataque se encuentran mejor porque tienen las espaldas cubiertas. Estoy convencido de que gana el que defiende bien'.
El Recre se ha defendido bien. La retaguardia ha sido su mejor línea. Hubo partidos, sobre todo al principio, en los que su conservadurismo llegó a exasperar a su afición, la misma que el pasado día 12, ante el Salamanca, pidió, puesta en pie, a Alcaraz que siguiera al frente del cuadro.
Un chiste había circulado en octubre referido a sus teorías futbolísticas: 'Un niño vuelve del colegio y comenta a su madre que le han llamado sus compañeros Lucas Alcaraz. La madre le pregunta: '¿Y qué hiciste, hijo mío?'. Y él responde: 'Pues... defenderme'.
El Recreativo, que la pasada campaña terminó el sexto, tras acariciar la posibilidad del ascenso hasta la penúltima jornada, ha tenido un presupuesto de 4,5 millones de euros, una cantidad de tipo medio para un equipo de Segunda. Unos números aproximados a los del Albacete, por ejemplo, pero distantes de los del Rácing de Santander, el Oviedo o el Elche, que oscilan entre los 12 y los 18 millones, y, por supuesto, lejísimos de los del campeón de la categoría, el Atlético de Madrid. El Recreativo es sociedad anónima deportiva desde julio de 1999, cuando el Ayuntamiento de Huelva, que preside Pedro Rodríguez, del Partido Popular, adquirió el 95% de las acciones de la entidad.
El Decano ha alcanzado el éxito pese a que los jugadores más destacados de la temporada pasada abandonaron el club. La plantilla ha estado compuesta por 25 futbolistas, de los que 12 eran nuevos. En el once titular únicamente han sobrevivido de la temporada anterior el cancerbero César, los carrileros Galán y Espínola y el centrocampista Óscar Arias, el capitán del equipo.
El conjunto ha tenido tres piezas esenciales. César, un veterano portero de 33 años, que ha vivido su sexta temporada en el club. Licenciado en Medicina, sufre miopía y lumbago, lo que le causa fuertes dolores de espalda. Pero siempre ha estado entre los guardametas menos batidos del fútbol español gracias a su capacidad de colocación entre los tres palos, con un estilo sobrio. Después de debatir su vida profesional por campos de Segunda B, vive entusiasmado la posibilidad de colocarse en el marco del estadio Bernabéu, por ejemplo, después de haber convertido siempre el fútbol en el centro de sus preocupaciones.
También ha sido importante el ariete Raúl Molina, uno de los goleadores de la categoría. Tras marcar un gol en el estadio Calderón de una perfecta volea que sorprendió algo adelantado a Burgos, desafió a Jesús Gil, el presidente rojiblanco, volviéndose hacia el palco para mostrar su dorsal y su nombre. El Atlético, el club en el que se formó, no contó en su día con él como futbolista.
Y en la segunda vuelta del campeonato resultó decisivo el mediapunta Antoñito, un jugador rapidísmo, inventor de jugadas envenenadas en el área rival, que llegó cedido por el Sevilla en el mercado de diciembre. Antoñito es un futbolista de apariciones fugaces, pero decisivas.
Además, el viejo Recre cuenta desde hace años con la aliada de los campeones: la suerte. En la tempoarada 1999-2000 descendió a la Segunda B, pero el castigo administrativo impuesto al Mérida, debido a sus impagos, devolvió al Decano, entidad de saneada economía, a la División de Plata vía despachos. La suerte también pudo influir en que en las últimas semanas el Recreativo ganara dos partidos decisivos en el Nuevo Estadio Colombino, inaugurado el pasado 8 de noviembre, con tantos marcados en el minuto 94 al Nástic y el Eibar.
El Recreativo, fundado en 1889 por los ingleses como un club de tenis, de juegos y de fútbol, el equipo más antiguo de España, sólo había estado antes una temporada en Primera, tras el ascenso conseguido el 14 de mayo de 1978 en Castalia. El póster de aquel equipo, con jugadores como Rincón, Víctor Espárrago, Lapi o Silvianes, está colgado, amarillento por el paso de los años, en muchos bares de la ciudad. Ahora, en esos bares están abriendo un hueco para colocar la fotografía de los nuevos héroes.
