Actividad escasa
Los datos económicos estadounidenses continúan confirmando la reactivación, pero en los mercados de valores empieza a extenderse la opinión de que todo esto ya está descontado y que sólo la entrada en una fase de crecimiento podrá hacer saltar las cotizaciones.
Las incertidumbres que suscitan los conflictos internacionales, abiertos o bajo la amenaza de hacerlo en breve, tampoco son la mejor invitación a mover el dinero, de ahí el conservadurismo de los inversores en unos momentos en los que, al menos en apariencia, habría que tomar posiciones a medio plazo.
La contratación en el Mercado Continuo cayó ayer hasta los 1.235,79 millones de euros, la segunda cifra más baja de este año,en parte porque apenas se produjeron operaciones institucionales.
Esta ausencia de actividad permitió a algunas cotizaciones una leve recuperación que llevó a los índices a romper la trayectoria bajista de las últimas sesiones. El Ibex 35 ganó el 0,66% y el índice general de Madrid el 0,60%, lo que permite a los analistas seguir considerando la actual situación como un movimiento de consolidación de precios.
Una de las sorpresas de esta jornada estuvo en el mercado de divisas, en el que el euro se revalorizó ante el dólar justo cuando los indicadores económicos apuntan en el sentido contrario. La moneda europea subió hasta 0,88 dólares desde los 0,87 del día anterior, con lo que un dólar pasaba a costar 1,13 euros.
Los inventarios subieron en enero en Estados Unidos por primera vez en un año, lo que indica que las empresas comienzan a hacer pedidos para atender una demanda latente. Asimismo, las peticiones semanales de subsidio de desempleo volvieron a descender, confirmando, por el momento, que las empresas han cerrado el ciclo de ajustes de plantilla.
