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VISTO / OÍDO
Columna
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El buen islam y el malo

Berlusconi dice lo que todo el mundo ha dicho hasta hace un puñado de años: que la civilización occidental es superior a la islámica, y a todas las demás. Me lo enseñaban de pequeño y me cantaban las glorias de la Reconquista y de las batallas contra los infieles, la capacidad española de llevar el lábaro de Cristo a tan malas gentes, y la esplendorosa fiesta en honor a Santiago, cuyo cristianismo consistía en cortar cabezas de musulmanes desde su celestial caballo blanco. Luego aprendí que todas las religiones eran igualmente desagradables; peor aún, dañinas, como pude comprender después cuando se volvió a cantar al imperio, que llevaba hacia Dios. Los fascistas tienen la ventaja de decir a gritos y arma al brazo, y bajo las estrellas, lo que la derecha normal no puede.

Berlusconi es un fascista demócrata y no quiere entrar en lo 'políticamente correcto'. No hay más que ver dónde está la técnica, la convivencia, el dinero y las armas: es la civilización superior. La incorrección política consiste en que Occidente Uno, Grande y Libre está tratando de separar el islam, la religión del Corán y los verdaderos creyentes, de los terroristas. La forma en que los clérigos de Pakistán trabajan sobre los de Afganistán, y de cómo estos últimos tratan de convencer al integrista Bin Laden de que se entregue o escape, que salga de los campos del opio donde está confinado, explica esta clara diferencia entre unos y otros, como los españolistas separan vascos buenos y vascos malos (aparte del terrorismo), y se está viendo en la inauguración del Parlamento.

En Afganistán mueren ya, sin necesidad de guerra: de hambre en los puntos fronterizos bloqueados, a pesar de lo cual en Pakistán los refugiados han pasado de dos millones a tres. Gente que pretende ser musulmana buena, y que les devuelvan la ayuda en comestibles que les han quitado. Puede que esta guerra 'larga y sucia' que anunció Bush al día siguiente del atentado se resuelva sin disparar un solo tiro, pese a que las flotas, los aviones y los infantes rodean la zona de los islamistas afganos: con muertos de hambre y enfermedades. Esto ya viene ocurriendo hace muchos años en muchos sitios. En África, en América, en Asia. Sólo que algunos tienen ya armas atómicas: civilización superior.

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