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19 delegados de ELA se sientan hoy en el banquillo por retener a un directivo

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de San Sebastián juzgará desde hoy a 19 delegados de ELA acusados de retener de forma ilegal al director de una residencia de ancianos de Rentería por no estar de acuerdo con el despido de un trabajador del centro. La Fiscalía pide para los procesados penas que suman un total de 44 años de prisión.

Los hechos sucedieron hacia las 11.00 del 23 de abril de 1999, cuando los acusados se presentaron en la residencia de ancianos Sagrado Corazón, en la citada localidad, 'introduciéndose cuatro de ellos en el despacho del director, al que comunicaron que eran delegados de ELA y que venían a manifestarle su desacuerdo con el despido de un trabajador del centro', según hace constar el Ministerio Público.

Los sindicalistas requirieron la presencia del concejal de Bienestar Social, quien se presentó en la residencia con un agente de la Ertzaintza. Según la versión de la Fiscalía, los 19 acusados 'ocuparon el despacho del director y el adyacente e impidieron que éste lo abandonara tras comunicarle que se encontraba retenido hasta solucionarse el problema'.

Desalojo por la fuerza

El agente 'intentó durante horas negociar con dos representantes del grupo'. El ertzaina, según el fiscal, llegó a advertirles de que 'la acción que estaban realizando podía constituir una infracción penal', pese a lo cual los delegados de la central nacionalista respondieron que 'asumían la responsabilidad'.

A la residencia acudieron el alcalde de Rentería, Miguel Buen, el capellán y trabajadores de la residencia, quienes, según la Fiscalía, 'intentaron poner en libertad del director' del centro, aunque sus gestiones resultaron 'inútiles'. 'Los acusados manifestaron que el director se encontraba retenido y secuestrado'.

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Finalmente, se solicitó el auxilio de la policía vasca para proceder a la liberación del director, para lo cual tuvieron que 'fracturar la puerta del despacho' que los sindicalistas habían bloqueado con mobiliario. Durante el desalojo, los acusados 'salieron sin ofrecer resistencia, salvo seis de ellos', a quienes los agentes 'tuvieron que agarrarles de los brazos y las piernas para sacarles'. Los daños causados ascendieron a 51.000 pesetas.

Para la Fiscalía, los hechos son constitutivos de un delito de detención ilegal que incluye a todos los acusados, y otro de resistencia que afecta a los seis procesados que no quisieron salir del despacho por su voluntad. También solicita tres años de prisión para dos de los acusados por el delito de detención ilegal y dos años de cárcel para cada uno del resto de los imputados. Igualmente pide ocho meses de privación de libertad para cada uno de los seis delegados que se resistieron a abandonar el despacho. Además, les reclama el pago de 51.000 pesetas por los daños.

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