Reunión de técnicos para abordar la seguridad de la Sagrada Familia
A la espera de contar con informes completos que expliquen las causas de la caída de una pieza de hormigón de 250 kilos de peso de la Sagrada Familia, técnicos del distrito del Eixample, los Bomberos de Barcelona y los directores de las obras del templo y del Patronato de la Sagrada Familia mantendrán una reunión la semana próxima precisamente para abordar la seguridad del recinto.
La pieza de hormigón arquitectónico que remataba la decoración de uno de los ventanales de la nave central se precipitó, el pasado 27 de diciembre, desde unos 40 metros de altura. Ocurrió de madrugada, circunstancia que evitó daños personales ya que la piedra cayó sobre el taller en el que trabajan una veintena de operarios en la obra de la Sagrada Familia.
La dirección del templo atribuyó el accidente a la acción de un 'remolino' de viento. Por ahora, ésta es la única causa apuntada a falta de que técnicos municipales del distrito del Eixample y de los Bomberos de Barcelona realicen informes más completos, según apuntaron ayer fuentes del Ayuntamiento de Barcelona. El consistorio barcelonés abrió un expediente para determinar lo ocurrido y se aseguró de que no existiera peligro para la celebración, el pasado domingo, de la misa diocesana, que congregó a 5.000 personas.
Precisamente la caída de la enorme losa ha sido uno de los detonantes para que técnicos municipales y los responsables de las obras del templo se reúnan la semana próxima.
'El Ayuntamiento no tiene un criterio establecido sobre si es preciso modificar o no los dispositivos de seguridad del templo y de las obras, pero es evidente que es uno de los puntos visitados por miles de personas y por ello es necesario concretar qué garantías de seguridad ofrece', argumentaba ayer un portavoz municipal.