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LA SITUACIÓN EN EL PAÍS VASCO

Un grupo bretón entrega 100 kilos de las 8 toneladas de dinamita que robó con ETA

El denominado Ejército Revolucionario Bretón comunicó ayer que ha devuelto un centenar de kilos de explosivos, procedentes de las ocho toneladas de dinamita industrial robada el 28 de septiembre de 1999 en una empresa de Plévin (departamento de Côtes-d'Armor) por un comando que, según la policía, integraba a militantes de ETA y del grupo bretón.Cinco toneladas y media del material robado fueron recuperadas posteriormente, pero se cree que otra parte ha sido utilizada por ETA para cometer sus atentados de los últimos meses en España. También fueron sustraídos unos 5.000 detonadores.

La entrega de los explosivos se produjo el viernes a unas decenas de kilómetros del lugar donde habían sido robados, a las pocas horas de conocerse la muerte de una persona en La Baule (departamento de Loire-Atlantique) por el estallido de un paquete bomba. En la entrega intervino el juez antiterrorista francés Gilbert Thiel.

El grupo bretón devuelve los explosivos para apaciguar "el clima político" en Bretaña y para que "cese la represión hacia el movimiento bretón", según un comunicado, en el que declina toda responsabilidad por cualquier otra acción realizada con el material explosivo robado, en un intento de dejar claro que ha devuelto lo que le quedaba. Otra nota, firmada por la Coordinadora anti-represiva de Bretaña, pide que sean puestos en libertad los cuatro detenidos por el robo de Plévin, uno de los cuales, Gérard Bernard, permanece en huelga de hambre.

Dos días después del robo, la policía francesa detuvo cerca de Pau a tres presuntos miembros de ETA, entre ellos Jon Bienzobas, Karaka, por su supuesta implicación en el caso, y recuperó en una casa de Idron, cerca de Pau, 2,5 de las ocho toneladas de dinamita sustraídas. Tres toneladas más fueron halladas poco después en una furgoneta abandonada en Pontivy.

La policía vigila a los independentistas bretones no sólo por ese robo, sino por el estallido de una bomba en un McDonalds en Quévert (Côtes-d'Armor) en mayo pasado, que mató a una empleada. A ello sucede la muerte provocada por el paquete bomba del viernes, cuya autoría no se ha establecido.

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