La policía atribuye a grupos antisistema la autoría de la colocación de un artefacto en una sucursal de La Caixa
La explosión de un artefacto de mediana potencia en una oficina de La Caixa en la ciudad de Barcelona produjo ayer numerosos destrozos en la entidad bancaria y en varios pisos del entorno, y causó heridas de carácter leve a un ciudadano de 54 años, Manuel L. P., que en aquel momento transitaba por la zona en compañía de su esposa. La explosión, registrada a las 0.30 horas de ayer, se produjo en el vestíbulo de una oficina de La Caixa situada en la avenida de la Mare de Déu de Montserrat, en el barrio barcelonés del Guinardó. El artefacto produjo destrozos en la entrada de la oficina bancaria, en el espacio de la doble puerta entre la calle y la entrada al establecimiento bancario, así como rotura de cristales en cinco pisos del edificio donde está la entidad bancaria y de los edificios colindantes.La onda expansiva tiró al suelo al transeúnte y a su esposa. El hombre fue evacuado al hospital de Sant Pau con una subida de tensión y, tras realizarle un electrocardiograma, fue dado de alta horas después. Hasta el momento, nadie ha asumido la colocación del explosivo, cuya composición está siendo analizada
La policía considera que los autores de la acción son grupos antisistema que eligen siempre objetivos simbólicos, como entidades bancarias, empresas de trabajo temporal o una cadena de hamburguerías. En lo que va de año se han producido en Cataluña más de 70 acciones de este tipo, que en ocasiones también han afectado al domicilio de algunos policías e incluso a una comisaría, como ocurrió el pasado lunes con el lanzamiento de ocho artefactos en L'Hospitalet.
