La patronal francesa aprueba sin fisuras la reforma del seguro de paro
La patronal francesa, Medef, acordó ayer por "unaminidad" la firma del protocolo de acuerdo para la reforma del régimen del seguro de paro que gestiona actualmente con los sindicatos de forma paritaria. La decisión de los empresarios sitúa al Gobierno en la tesitura de dar o no carta de naturaleza a un proyecto con el que mantiene reservas y que endurece las condiciones a los parados para cobrar el subsidio.
Pese a ello, la Medef parece dispuesta a jugar todas las bazas en su proyecto de "refundación social" y a mantener la amenaza de que abandonará todos los organismos paritarios que gestiona con los sindicatos en el caso de que no sea aceptado "el conjunto" de sus planteamientos. El acuerdo, rechazado desde el principio por la central comunista CGT y por Fuerza Obrera (FO), pero suscrito por el sindicato mayoritario CFDT y la CFTG, plantea una reforma profunda del actual seguro de paro. Según el protocolo de acuerdo, los parados tendrán que someterse a un proceso de reinserción laboral y no podrán rechazar más de cuatro ofertas de empleo si no quieren verse privados de su derecho a cobrar el subsidio.La decisión de ayer de la patronal sitúa al Gobierno en la tesitura de dar o no carta de naturaleza a un proyecto cuya filosofía considera más liberal, altera el actual seguro de paro y reduce notablemente las cotizaciones, particularmente las patronales. Martine Aubry, ministra de Empleo y Solidaridad, no oculta sus temores de que el dispositivo acordado por la Medef y dos sindicatos deje a cargo del Estado a aquellos parados que carecen de menos posibilidades de inserción laboral.
El actual convenio que regula la gestión conjunta de los organismo sociales expira el próximo día 30. En el caso de que no haya acuerdo, el Gobierno tendrá que asegurar por la vía del decreto el pago a los parados. La posición cerrada de la patronal reduce el margen de maniobra del Gobierno, si bien los portavoces de la CFDT, la central mayoritaria, creen que el acuerdo es posible y que el Parlamento difícilmente rechazará un acuerdo avalado por dos sindicatos.
