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JORGE WAGENSBERGDIRECTOR DEL MUSEO DE LA CIENCIA BARCELONÉS

"Necesitamos una legislación global sobre las investigaciones genéticas"

Jorge Wagensberg, doctor en Física y director del Museo de la Ciencia de Barcelona, disertó recientemente en Vitoria sobre la necesidad de una teoría de la complejidad para explicar los fenómenos naturales.Pregunta. ¿Qué es la teoría de la complejidad?

Respuesta. Los objetos de este mundo son invisibles para la comprensión humana porque son muy grandes, como el cosmos; muy pequeños, como los átomos, o muy complicados, como las mariposas. La complejidad se define como un sistema que tiene muchos grados de libertad, muchos estados accesibles. Por ejemplo, un gusano es más complejo que una piedra, pero menos que un insecto.

P. ¿Y estas nuevas teorías que encuentra necesarias para explicar la naturaleza, valdrían para las relaciones humanas?

R. Sí. Aunque para empezar, habría que decir que dentro de la biología todavía se está en el ámbito de la descripción darwinista: hay más frases que ecuaciones. Mi propuesta es que desde la física y la matemática se puede invadir el campo de la biología para explicar fenómenos de la complejidad biológica. Y de aquí se podría ir a organizaciones más complicadas donde interviene la inteligencia, como es la humana.

P. Entonces, estamos todavía lejos de esa aplicación matemática a las relaciones sociales.

R. En los últimos años ha habido un gran avance porque hay elementos que antes no teníamos, como las computadoras, que han permitido que muchas teorías que antes no eran más que especulaciones hayan entrado en contacto con la realidad.

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P. Hay avances científicos que producen vértigo, como la ingeniería genética.

R. Por supuesto que tiene su parte muy positiva, sobre todo en la medicina. Todo el mundo está de acuerdo en que es una gran solución en el ámbito de los trasplantes: al final seremos como coches que nos iremos cambiando las piezas a medida que se averían para llegar, en el fin de nuestra vida, con pocas de las que empezamos. Si la clonación funciona se podrán cultivar células propias que podrán llevar por ejemplo a un diabético a cambiar su páncreas enfermo. Lo que ocurre, como siempre que hay un descubrimiento, es que también nos encontramos con consecuencias negativas que hay que afrontar desde la ética científica y una nueva legislación, para lo cual la opinión pública cada vez es más importante.

P. Empresas e instituciones están tras la investigación sobre el genoma humano. ¿Cómo se explica esta situación?

R. Aquí es donde se ven las máximas contradicciones. Necesitamos una legislación global, porque las normas europeas no son las mismas que las estadounidenses. Aunque sí es verdad que cada vez hay más comités de ética. Creo que lo más importante es legislar, proceso que va más lento, como es lógico, que las novedades científicas.

P. Usted es un optimista científico, pero también hay muchos pensadores recelosos de los avances de la técnica.

R. Ciencia y técnica no es lo mismo, aunque los dos utilizan el método científico. El objetivo final de la ciencia es cambiar el mundo, mientras que el de la técnica es intervenir en él, de ahí que ser optimista o pesimista respecto del conocimiento no tenga sentido porque no hay nada que pueda oponerse al conocimiento. Entre conocer o no, prefiero conocer.

P. La evolución técnica está produciendo catástrofes desconocidas para la Humanidad.

R. Yo creo que no es tanto un problema de la tecnología, porque en ella está la solución posible, sino de desarrollo. Los 6.000 millones que estamos en el planeta no pueden vivir como nosotros. Tenemos que parar y reflexionar; utilizar el conocimiento para solucionar esta situación.

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