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Confianza en Wall Street

Si hay tranquilidad en la Bolsa de Nueva York, hay tranquilidad para todos, y el haber alcanzado un máximo histórico justo en la sesión previa a la reunión de la Reserva Federal ha conseguido trasmitir calma a todos los mercados financieros. Incluso en la jornada de ayer, el Dow Jones se resistió a las retiradas de beneficios (al cierre, perdió un 0,15%), que parecían provocadas más por el máximo histórico que por el temor a lo que pudiera hacer la FED.La bolsa española aprovechó la ocasión para ganar altura en ausencia de tensiones externas, algo que apenas había conocido en este mes. El mercado continuo negoció 114.720 millones de pesetas efectivas, 689,48 millones de euros, la tercera cifra más alta de este mes, y el índice general de la Bolsa de Madrid subió el 1,23%, con lo que acumula una subida del 4,60% en agosto, después de haber caído hasta los mínimos anuales.

Si en la sesión anterior se imponía la desconfianza, ayer todas las bolsas funcionaron en el convencimiento de que la FED se ajustaría a las previsiones de los analistas estadounidenses, es decir, a una subida de 0,25 puntos, hasta el 5,25%, en los tipos de interés, como así fue.

Nadie se acordaba ya de que dos de las principales preocupaciones de Alan Greenspan en los últimos meses han sido los costes laborales y la bolsa. El desempleo no ha bajado y los costes laborales han subido, al tiempo que la bolsa parece lanzar un desafío desde una posición de prepotencia.

El BCE, mientras tanto, adjudicaba 86.000 millones de euros en la subasta de esta semana y al mismo tipo de interés, el 2,5%. Ayer era evidente en los mercados que el diferencial entre la zona euro y Estados Unidos iba a crecer, lo que provocará tensiones en divisas y en deuda. El euro cayó a primeras horas de la mañana hasta 1,0420 dólares, aunque después se recuperó hasta obtener un cambio oficial de 1,0512 dólares. Al cierre de los mercados cotizaba a 1,0520.

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