Repsol aprueba la ampliación del 30% para comprar YPF

La junta general extraordinaria de accionistas de Repsol aprobó ayer la ampliación del capital social de la empresa con una emisión de 240 millones de acciones, ampliable a 288 millones, por valor de más de 5.180 millones de euros y la emisión de obligaciones por un importe de 2.000 millones. Con estos 7.180 millones de euros (1,19 billones de pesetas) Repsol financiará más de la mitad de la compra del 85% de la argentina YPF por 12.900 millones (2,15 billones de pesetas), para convertirse en la novena petrolera del mundo por reservas.

La junta general extraordinaria de Repsol aprobó, en el transcurso de hora y media -tiempo en el que solamente intervinieron dos accionistas, uno en favor y otro en contra-, la mayor ampliación de capital de la historia de España, de las 10 mayores de Europa y equivalente al 30% del capital de la compañía en una hora y media. Sabido era que iba a ser así, pero sorprendió la celeridad de la aprobación, convirtiéndola en un trámite para Alfonso Cortina, presidente de Repsol.Cortina ya aseguró en su discurso previo a la votación que la tasa de endeudamiento de Repsol, hoy elevada al 70% por la compra de YPF, estará por debajo del 50% en el año 2000, y en el 2002 será inferior al 40%. La aprobación de esta ampliación de capital más la emisión de obligaciones convertibles y/o canjeables por acciones de la propia compañía era crucial para la refinanciación de Repsol, endeudada en 16.000 millones de euros en créditos sindicados concedidos por varios bancos, entre ellos el BBV, que posee el 9,9% de Repsol, para pagar los 12.900 millones de euros (2,15 billones de pesetas) que le cuesta su apuesta argentina. La refinanciación también provendrá de desinversiones, por ejemplo, a través de la venta de sus activos en Indonesia, por valor de 2.400 millones de euros (unos 400.000 millones de pesetas).

Sin suscripción preferente

Tanto en la ampliación de capital como en la emisión de obligaciones se excluye el derecho de suscripción preferente, y este fue el punto que irritó al accionista que se opuso a ambas operaciones. Alegó que la exclusión perjudicará a los accionistas que no participen de la oferta pública de venta (OPV). Pero Cortina ya había expuesto las razones de excluir este derecho. La primera era que nunca se había hecho una emisión en los mercados del tamaño planteado por Repsol utilizando ese derecho y que en las otras nueve realizadas en Europa tampoco. Y añadió que la ampliación que Deutsche Telekom planea hacer próximamente, que duplica en tamaño a la de Repsol, tampoco. Además, Cortina recordó que las ampliaciones con derechos preferentes tienen plazos dilatados que suponen tomar riesgos de mercado, y el objetivo de esta operación es obtener la mayor demanda al mejor precio, el más cercano al mercado.Zanjada la cuestión, la junta también aprobó adelantar el pago del dividendo complementario con cargo al ejercicio de 1998 al 1 de julio y limitar al 10% del capital social con derecho a voto el número máximo de votos que puede emitir un mismo accionista.

La oferta pública de adquisición (OPA) que Repsol lanzó sobre YPF termina el 23 de junio. Y por lo que sucedió ayer, Repsol ya tiene luz verde para sumar al 14,99% de YPF, que compró en enero pasado, el 85% ahora en juego, para controlar la petrolera argentina y convertirse junto a ésta en la novena mayor del mundo por reservas.