Una mina de oro llamada "Monica"

La gente está saturada, pero quiere más; durante 13 meses tuvo a diario su droga y ahora sufre el síndrome de abstinencia. Por eso, unos 42 millones de norteamericanos, el 45% de la audiencia a esas horas, vio anoche en ABC la entrevista de Barbara Walters con Monica Lewinsky, según las previsiones de esta cadena de televisión. Era la primera vez que Lewinsky se confesaba con relativa libertad ante un periodista: sus muchas declaraciones anteriores habían sido realizadas bajo juramento ante fiscales deseosos de atrapar al presidente de Estados Unidos.Clinton ha escapado a la destitución, pero la historia de su relación con Lewinsky sigue siendo la más picante y completa de un fin de siglo en que la información se ha convertido en espectáculo y los temas del periodismo amarillo, esencialmente el sexo y la violencia, han ido desplazando a los políticos. Y eso es toda una mina de oro. ABC comenzó anoche a explotarla vendiendo los espacios de publicidad del programa 20/20 a 800.000 dólares (unos 120 millones de pesetas) por treinta segundos, cinco veces su precio habitual.

Lewinsky, que apareció con su pelo negro recogido y aplastado y un fuerte maquillaje que le adelgazaba el rostro, no se llevó un centavo de esa lluvia de dinero; la veterana Barbara Walters, como es su costumbre, se había negado a pagar a su invitada. Pero para la ex becaria fue un ejercicio de promoción de su producto: la historia de sus relaciones sexuales con el hombre más poderoso del planeta. A partir de hoy, el producto puede empezar a reportarle una fortuna, cuyo bocado inicial tendrá que dedicar a las tremendas minutas de sus abogados.

Al precio de 30 dólares (4.600 pesetas), un total de 450.000 ejemplares de la primera edición de Monica"s Story (La historia de Monica) llegarán mañana a las librerías de Estados Unidos. El libro, escrito por el británico Andrew Morton, que también fue biógrafo de la princesa Diana, ya era ayer el número cinco en la lista de los más vendidos por Amazon, la librería de Internet. Decenas de miles de personas han pagado para que Amazon les envíe de inmediato una copia. "Todo el mundo dice que está asqueado por este caso, pero muchísima gente tiene ganas de conocer la versión de una muchacha que ha sido descrita hasta la saciedad por la Casa Blanca como una buscona", dijo Bill Curry, portavoz de la librería virtual. Es tan sólo el principio de la monicamanía que parece desencadenarse sobre el planeta. Numerosas publicaciones, entre ellas el diario británico Daily Mirror, el alemán Bild, el italiano Corriere della Sera y el semanario francés Paris Match, han comprado, a unos 200.000 dólares por cabeza, los derechos para reproducir Monica"s Story. En el libro, Lewinsky denuncia los métodos inquisitoriales del fiscal Kenneth Starr. Cuenta, entre otras cosas, que cuando, en enero de 1998, Starr y los suyos la forzaron a una primera declaración en un hotel de las afueras de Washington, se sintió tan mal que pensó en suicidarse arrojándose por la ventana desde el décimo piso del establecimiento.

Otros medios han pasado por caja para poder conversar con Lewinsky. Romperá el fuego esta semana la entrevista realizada por Jon Snow para la cadena de televisión británica Channel Four News. Esa cadena ha pagado más de 600.000 dólares a la ex becaria, pero ya ha vendido los derechos a reproducir la entrevista a unas 25 televisiones de todo el mundo, desde Singapur a Israel, a precios que van desde los 100.000 a los 500.000 dólares. Lewinsky recibirá el 70% de esa comercialización. [Las cadenas autonómicas han adquirido los derechos para emitir esta entrevista en España y hoy mismo será difunida por Canal 9, Canal Sur y TVG].

Anoche, ante Walters, Lewinsky, como había sido adelantado, pidió perdón a Hillary y Chelsea Clinton, pero también hizo un retrato insólito del presidente. Dijo que Clinton es "un hombre muy sensual" y en permanente conflicto con "sus fuertes inhibiciones religiosas", pero, por encima de todo, un político. Walters le pasó el vídeo de la declaración televisada de Clinton del pasado agosto. "Ese día", contó Lewinsky, "me sentí como una pieza de basura, me sentí sucia y manipulada". Según la ex becaria, ese acto de contrición no fue del todo sincero. "Creo", dijo anoche, "que lo que él lamenta es haber sido descubierto".

Lewinsky, que también ha sido fotografiada a precio de oro por ¡Hola! y Marie Claire, irá en las próximas semanas a Europa para promocionar su libro.