_
_
_
_

Los sindicatos responden a la presión de Ford con paros diarios en octubre

El comité de empresa de Ford España en Almussafes, aprobó ayer un nuevo calendario de paros para octubre, que culminará con una jornada de paro y una manifestación en Valencia el próximo día 21. Los sindicatos responden así a la decisión de la dirección de imponer un nuevo sistema de pausas, así como turnos extraordinarios los sábados. El ministro de Industria, Josep Piqué, que inauguró la Feria del Mueble de Valencia, pidió a las partes un "último esfuerzo" para solucionar el conflicto, que advirtió "puede perjudicar a todos".

El comité de empresa de Ford en Almussafes, compuesto por los sindicatos UGT, CC OO, CGT, SPV y Famif, adelantó un día su reunión a la vista del anuncio realizado el pasado viernes por la dirección de imponer a partir del 5 de octubre un nuevo sistema de pausas en la planta de montaje, que evite el paro total de la cadena. El ultimátum lanzado por la gerencia de Almussafes de trasladar parte de la producción del nuevo modelo Focus a la factoría alemana de Colonia no parece haber impresionado a los sindicatos. A pesar de la unanimidad con que actúan hasta la fecha, ayer los sindicatos llevaron al comité tres propuestas de paro diferentes. CGT postuló un cambio de estrategia con respecto a lo acordado en junio. Este sindicato propuso paros de media hora diarios, que se efectuarían en dos tandas de 15 minutos. Este calendario culmina con un paro general el 21 de octubre y una manifestación en Valencia. UGT se pronunció a favor de mantener la actual fórmula, es decir, paros de dos horas dos días a la semana. En ambos casos las protestas suman 16 horas al mes. La propuesta del SPV, sindicato escindido de CC OO, iba en el mismo sentido que la de UGT. Efectuada la votación se impuso la propuesta de CGT, gracias al apoyo de la sección sindical de CC OO. UGT apoyó la suya y el SPV y el Famif, una tercera. Al final habrá paros diarios de media hora a partir del 5 de octubre. El comité mantiene, por tanto, el pulso lanzado por la gerencia, mientras las negociaciones del XII convenio colectivo continúan "bloqueadas, pero no rotas", matizaba ayer un representante sindical de Ford. Un portavoz de CC OO dijo ayer que con la manifestación, a la se sumarán los familiares, pretenden dejar patente su rechazo a la dirección, "que es capaz de obligarnos a trabajar 20 sábados extra en lugar de crear más empleo". De momento no hay previstos nuevos contactos entre la dirección y el comité de empresa. La Generalitat, que intervino en una ocasión en el conflicto con el ánimo de acercar a las partes, se mantiene ahora fuera de escena. Y, mientras tanto, las posturas se radicalizan. La negociación del convenio dura ya nueve meses sin que se haya producido avance alguno. La plataforma reivindicativa presentada por los sindicatos, con más de 50 puntos, hace hincapié en la reducción de la jornada a 35 horas, la conversión de empleo temporal en fijo, así como la mejora de categoría de algunos operarios. Nada más alejado de las pretensiones de la gerencia que ante el lanzamiento del nuevo modelo, necesita que la plantilla trabaje más horas en caso de que haya un boom de ventas. Las previsiones de la compañía son que Almussafes fabrique 30.000 unidades adicionales a las previstas. Las condiciones laborales imperantes en la planta alemana de Saarlouis, que junto a Almussafes fabrica el Focus en exclusiva, donde los trabajadores han aceptado trabajar todos los sábados del año, no juegan a favor de la plantilla de Almussafes, a la que la gerencia se refiere como una de las mejor retribuidas del sector español del automóvil. Nadie mueve ficha. El diálogo permanece atascado. Mientras, el conflicto ha traspasado las verjas de la factoría. La negociación del XII convenio colectivo de Ford, que se produce a las puertas de unas elecciones sindicales, se discute fuera de los despachos. Algunos quieren implicar a la opinión pública, no en vano la factoría de Almussafes es la mayor industria valenciana. Ayer, el ministro de Industria y portavoz del Gobierno, Josep Piqué, que visitó Valencia para inaugurar la Feria Internacional del Mueble, opinaba al respecto. Piqué pidió a las partes un "último esfuerzo" para solucionar el conflicto laboral. "Este conflicto requiere un ejercicio de responsabilidad por ambas partes", apuntó el ministro, quien aseguró que en estas situaciones "salimos todos perjudicados". Piqué calificó la situación de "complicada", pero insistió en que en el sector del automóvil hay que luchar permanentemente por nuevas inversiones.

Vuelta a los orígenes

Los operarios más antiguos de Ford no recuerdan una negociación tan larga y conflictiva del convenio desde que la factoría de Almussafes abriera sus puertas en la década de los años setenta. La gran cantidad de organizaciones sindicales representadas en aquella época en la Ford de Almussafes -de todo el arco político-, protagonizaron los más conflictivos de la historia laboral de esta compañía. La situación es diferente en las formas, pero igual de compleja en el fondo. Desde las últimas elecciones sindicales el comité de empresa se ha fragmentado. Ford es además la primera empresa de la Comunidad en número de trabajadores -alrededor de 8.000-, lo que provoca que otros comités sindicales sigan las negociaciones con atención y lo utilicen a modo de guía. Pero lo paradójico de esta situación es que hacía tiempo que Almussafes no gozaba de tan buena situación como ahora.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_