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"Protagonistas" cumple 25 años en las ondas

Rosario G. Gómez

Nació con un formato importado de Italia y se ha convertido en el programa más veterano de la radio española. Luis del Olmo (Ponferrada, León, 1937) ha cumplido este mes 25 años al frente de Protagonistas, un espacio que abrió el camino hacia un nuevo género en la radio española: el magazine. Salió al aire en Radio Nacional de España, pasó por la Cope, y desde 1990 está anclado en Onda Cero. Protagonistas ha ocupado 35.000 horas en las ondas españolas y ha desplazado los micrófonos a las profundidades de las minas y a las entrañas de una central nuclear.

Del Olmo no descarta, ante la próxima temporada, una nueva mudanza. En este cuarto de siglo, el periodista ha contado con una audiencia fiel, que ha recorrido el dial en la misma dirección en la que se ha movido su programa. "Afronto los 25 años como un chiquillo. Ganas no me faltan para cumplir otros 25. Protagonistas fue una buena idea importada de Italia por Jorge Arandes", afirma. Confiesa que aquella aventura comenzó con mucha timidez, pero también con un entusiasmo desbordante. "Soy uno de los hombres afortunados de la radio. Con Protagonistas me tocó el gordo. Era un micrófono fantástico, pero un micrófono de fuego que me podría quemar en cualquier momento.", agrega.Protagonistas se integró en aquella radio "un tanto pacata" de los setenta y su responsable comenzó a estar expuesto a un torrente de broncas y expedientes, "pero nunca llegaron a cortarme la cabeza", dice. En estos años, ha pasado por etapas dramáticas y otras felices. Uno de los "momentos negros" se produjo durante las incipientes tertulias, en las que "se ponía verde" al entonces presidente del Gobierno, Adolfo Suárez. "Aquello tuvo unas consecuencias en principio nefastas. Me condenaron a las galeras del pasillo, pero al cabo de 15 días me devolvieron el programa", recuerda.

Del Olmo asegura que en aquellos tiempos "las venidas a Madrid con órdenes tajantes y autoritarias para que me presentara en la dirección general y diera cuenta de mis comentarios estaban al orden del día. Pero el programa cada vez tomaba más cuerpo y tenía más oyentes". En esos años, su voz era escuchada por seis millones de oyentes. La SER era prácticamente la única competencia.

Protagonistas trasladó los sonidos de la transición y se vio envuelta en los aires de libertad que respiraba la radio a las puertas de la democracia. Tras un largo periodo por RNE, el programa y su conductor se movieron a la Cope. Le fichó José Luis Gago, asesor eclesiástico de la cadena de la Conferencia Episcopal. "La Cope no tenía emisora en Madrid. Funcionaba con un viejo cacharro de un kilovatio, donde no se oía de acera a acera. Puse como condición que firmaba si se instalaba una emisora en Madrid. Y así fue".

El siguiente paso fue Onda Cero. "Había una luna de miel entre la Cope y yo hasta que un nefasto presidente de la cadena vierte comentarios en una reunión del hotel Reconquista de Oviedo en los que no salgo nada favorecido. Entiende que me he subido al guindo y que los cariños de la empresa se tenían que repartir con otros profesionales. No venían a cuento aquellas declaraciones. Empezaron las fricciones personales y coincidió que Miguel Durán tenía en su agenda el nacimiento de una nueva empresa radiofónica llamada Onda Cero. En una noche me pasé a la competencia. Y hasta ahora".

Entre sus peores experiencias ante al micrófono recuerda aquella emisión en la que se coló en antena Jon Idígoras. Ocurrió tras el asesinato de un ingeniero de la central nucelar de Lemóniz. "Hice un comentario diciendo que probablemente los etarras y sus socios de Herri Batasuna estarían celebrándolo con champaña. Idígoras pidió que lo retirara. No lo retiré, sino que lo ratifiqué y tuvimos una de las conversaciones más duras de la historia de la radio. Él me llamó de todo y yo me despaché a gusto. Las consecuencias fueron 10 meses de escolta". Durante las 35.000 horas de radio también vivió episodios satisfactorios, como la felicitación en directo al Rey el día que don Juan Carlos celebraba su onomástica.

Tertulias matinales

En estos 25 años, Protagonistas ha sido, según su responsable, "una escuela de magazines". Y ha sido también el programa que consolidó las tertulias. "Quien pone en marcha las tertulias es Fernando Ónega en las noches de la SER, pero toman carta de naturaleza en las mañanas cuando las incorpora Protagonistas", dice. "Pueden tener sus defectos, pero nadie puede acusarnos de ser una tertulia que dé leña al mono desde una misma dirección. Es plural, tolerante y abre los micrófonos a los oyentes".La clave de la longevidad del programa es "mezclar las noticias serias con el humor más desternillante", representado por El jardín de los bonsáis y El debate sobre el estado de la nación, espacio que tras 15 años desaparecerá por culpa de la enfermedad de Luis Sánchez Pollack, Tip. Su hueco lo ocupará La jaralera.

De cara al futuro, Del Olmo asegura que Protagonistas es un organismo vivo, que va renovándose constantemente. "No nos apoltronamos. Buscamos escenarios nuevos. Bajamos a la mina o emitimos desde una central nuclear. Si algo no funciona y se encienden algunas alarmas, cambiamos personajes o secciones e intento echarle gasolina super sin plomo para que el motor vaya más holgado".

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