España tendrá generales de cuatro estrellas para adecuarse a sus aliados
La homologación con la OTAN obligará incluso a modificar los grados tradicionales de las Fuerzas Armadas y a crear un nuevo empleo: el general de cuatro estrellas. La mayoría de los países aliados tienen cuatro empleos de oficial general, mientras que España sólo tiene tres, lo que origina problemas y confusiones en la relación entre ellos. Y no sólo de protocolo.
El Ministerio de Defensa está estudiando dos opciones. Una consiste en crear un empleo por debajo de contraalmirante en la Armada y por encima de teniente general en el Ejército de Tierra y el Aire. La otra pasa por crear un nuevo empleo para los tres ejércitos por encima del de almirante y teniente general, que se denominaría almirante de la Armada o general de Ejército.
Lo más probable es que el nuevo empleo se limite a los miembros de la cúpula militar y a los oficiales que ocupen en la OTAN cargos que correspondan a generales de cuatro estrellas; por ejemplo, el de jefe del Mando Regional Sur, en el caso hipotético de que un español llegue alguna vez a ostentarlo. A diferencia de los demás, sería un empleo ligado al desempeño del cargo y se perdería al cesar en él.
En todo caso, el empleo de capitán general seguirá reservado al Rey y a los militares en la reserva a los que se conceda con carácter honorífico. Eso sí, el Rey ganará un estrella y ostentará cinco en su bocamanga.