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ARTE

La fumigación da al traste con una exposición novel

Era su primera exposición. José Antonio Pizarro se acicalaba el jueves pasado en su casa para tan importante acontecimiento cuando, una hora y media antes de la gran cita, recibió una sorpresiva llamada. "Se suspende la muestra porque hay que fumigar. Avisa a los invitados para que no vayan". La portadora de tan sorprendente noticia era la directora del Centro Cultural Los Bohemios,en Villaverde, la sala con la que Pizarro había concertado la muestra cinco meses antes.No hubo tiempo para cancelar la inauguración: a las ocho de la tarde, las 80 personas a las que Pizarro había invitado personalmente y las bandejas del cóctel que había pagado de su bolsillo (30.000 pesetas) sufrían la nube gaseosa de la fumigación, á cargo de un técnico municipal que tenía la orden de desinfectar el edificio entero. "Todo el mundo estaba alucinado, y el operario no paraba de ftimigar", se queja el artista.En la calle, apoyados en las columnas, se lucían los cuadros de este artista de 32 años y en paro. Sus padres, sus hermanos y él mismo llegaron con el tiempo justo para poner la obra a salvo.Réplica municipal

En la junta municipal justifican su actuación. Dicen que el Ayuntamiento avisó a mediodía de sus planes de desinfección. "Hubo una orden de desinfección, ese departamento tiene su calendario", explica Monserrat Solano, directora de los servicios culturales de esa junta. Y añade que ofrecieron al artista otra sala para exponer sus cuadros. "Desde el primer momento mantuvimos un talante dialogante. Le ofrecimos prorrogar la exposición, pero él procedió con falta de respeto. Lógicamente, ahora las salas están ocupadas, habría que buscar un hueco para sus cuadros", explica Solano.

Pizarro lo niega. "No quieren ni recibirme. Un año de trabajo tirado por tierra... Es la típica patada a un ciudadano de a pie". Y puntualiza: "No es verdad que me hayan ofrecido otros centros. Me han dicho que la única solución es que ponga un recurso, porque de aquí no sale ni un duro", declara el artista.

En la unidad de servicios culturales de este distrito matizan que la fumigación no perjudica a los cuadros. "Quienes tenían que salir de la sala eran las personas. Los técnicos municipales aseguraron que los cuadros no corrían peligro", dice Francisco Gómez Mijangas, director de los centros culturales de Villaverde. Pizarro replica: "Fumigaron conmigo dentro. Y la junta municipal no tiene ni idea de si eso perjudica o no a la obra", contesta Pizarro.

El concejal de Izquierda Unida Félix López Rey se ha interesado por el asunto. "El Ayuntamiento debe asumir lo que ha hecho mal. Tiene que volver a programar inmediatamente la exposición de Pizarro, y pagar el cóctel", dice. "Es muy fuerte que en su primera exposición le suceda esto", concluye el concejal.

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