Cruenta lucha en México por el control del imperio del 'narco' Amado Carrillo
La extraña e inesperada muerte de Amado Carrillo Fuentes, el señor de los cielos, uno de los más poderosos traficantes de droga del mundo, ha desatado una cruenta lucha entre sus herederos y enemigos por el control del multimillonario comercio mexicano de la cocaína. Aunque aún es pronto para saber quién se quedará al frente, del lucrativo negocio, la lucha ya se ha cobrado seis víctimas en sólo dos semanas. Las autoridades temen una verdadera guerra entre clanes.
Carrillo murió el 4 de julio en un hospital tras someterse a una operación de cirugía plástica y una liposucción. Al día siguiente, Tomás Colsa McGregor, al que la justicia norteamericana considera el principal blanqueador de dinero del cartel de Carrillo, fue capturado en su casa de Ciudad de México y torturado. Murió de varios tiros en la cabeza. En las dos semanas siguientes, cinco miembros de nivel intermedio de la misma organización fueron asesinados en Juárez, el centro del imperio de Carrillo. Los hombres de Carrillo, que controlan los envíos ilegales de droga a través de la frontera mexicana desde Tejas a Arizona, forman la asociación de contrabando de cocaína más grande que opera en Estados Unidos. En los últimos años se han apropiado de una gran parte del sistema de distribución de drogas en EE UU, desplazando a los grupos colombianos como el cartel de Cali.
Las autoridades estadounidenses y mexicanas aseguran que todavía es pronto para saber quién va a heredar la jefatura del cartel de Carrillo o quién lleva ventaja en estos momentos...Tampoco está claro si las matanzas son el resultado de luchas intestinas o el trabajo de organizaciones rivales, en particular la de los hermanos Arellano Félix con sede en Tijuana. Este cartel, encabezado por cinco hermanos, controla la frontera de C California y parte de la de Arizona. Fuentes dé espionaje señalan que, si estallara una guerra a gran escala entre los grupos, lo más probable es que ésta se desarrolle a lo largo de la frontera con Arizona, donde Carrillo intentó desplazar a los Arellano.
"Podemos esperar un período de violencia mientras algunos intentan adquirir o prohibir que otros adquieran lo que es un negocio de millones y millones de dólares", explicó un funcionario de la DEA (la agencia antidroga de EE UU) con base en México. "Siempre, hay movimiento después de un cambio como éste. Sólo puedes, adivinar,lo que va a pasar. Nadie sabe. Los mismos traficantes no lo saben".
Asesinatos brutales
Si las matanzas son el resultado de un intento de los hermanos Arellano Félix de apropiarse de las rutas tradicionales de Carillo, la guerra podría ser especialmente sangrienta. Los últimos asesinatos han sido brutales. El sábado, Juan Eugenio Rosales, un socio de Carrillo conocido por El Genio, murió a tiros mientras aparcaba. Otras dos personas, un hombre y una mujer, fueron halladas muertas en el maletero de un automóvil. Sus cuellos estaban atados con cordones, sus cabezas cubiertas con bolsas de plástico y los pies enrollados con alambre."Nunca habrá paz entre los dos grupos", explicó un funcionario de EE UU, que ha seguido la evolución de los carteles. "Hay demasiada mala sangre. Cada grupo ha matado a las mujeres y los hijos del otro y ha, filtrado in formación sobre sus rivales. Es un tema personal".
Los expertos en narcotráfico de los dos países creen que el liderazgo de la organización de Carrillo es compartido en la actualidad por sus tres lugartenientes. Cualquiera de ellos puede surgir como la fuerza dominante, dependiendo de negociaciones internas y de la voluntad de los suministradores para tratar con ellos individual o colectivamente. Se ha identificado a los tres como Juan José (Blue) Esparragoza, un vínculo clave entre la organización y los colombianos; Vicente Carrillo, el hermano pequeño de Amado, que estaba a cargo del transporte de cocaína, y Héctor (El Rubio) Palma, el más violento de los tres.
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