Mariano Haro: "Antes no pagaban"
Pueden pasar los años, pero su leyenda permanecerá siempre. También su sinceridad. Mariano Haro ha sido santo y seña del atletismo de fondo español y tiene muy claras las razones de la explosión: "Para ser un buen maratoniano hay que tener voluntad, ganas, sacrificio y gran preparación física. Pero están de moda los grandes maratones porque ahora son un buen aliciente. Bastante más que ser pertiguista o lanzador de peso. Que les pregunten lo que han ganado a Fiz o a Antón. Éste no se habrá venido de Corea hace unos días con mucho menos de 20 millones. Vale la pena ya el sacrificio, aparte de que sirvas. Y que cobren todo lo que puedan porque se lo merecen. Para que en el futuro no tengan que vender chándals ni estar cobrando letras como yo, por ejemplo".Haro, sin embargo, no se lamenta de no haber aprovechado "este tiempo": "Tengo la satisfacción del deber cumplido. A mí me llamaban para todo y no me negaba. Se miraban los rivales en cada competición y si tenía que correr los 3.000 obstáculos lo hacía por combinarme con Álvarez Salgado. Y si no, los 5.000 y los 10.000 y la repera. Pero precisamente por eso nunca se me dedicó tiempo para preparar el maratón. Tenía la ilusión de hacer 2.12 cuando se hacía 2.14 o 2.16, pero me sacaban en una carrera de 5.000, quedaba campeón de España, hacía una buena marca europea y me relajaba. Y cuando llegaba el cross, no digamos. Si me daban 60.000, 70.000 u 80.000 pesetas, lo que más llegué a ganar, pues no me iba a negar. En el maratón no pagaban. Te llamaban de la San Silvestre o de la Jean Bouin y te decían: 'Mariano, que te damos 60.000 pesetas' Y allá me iba, claro".
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