Sala dice que la condena a Estevill es leve para un delito tan "deleznable"
El presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Pascual Sala, cree que la condena por prevaricación a seis años de inhabilitación contra Luis Pascual Estevill, ex vocal del Consejo, es leve si se tiene en cuenta que su delito "es el más grave que se puede imputar a un juez, y el más deleznable". La sentencia del Supremo también removió las aguas políticas, y el alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, emplazó a Jordi Pujol a que "se explique" puesto que CiU propuso a Estevill para el CGPJ.
Sala, también presidente del Tribunal Supremo, cree que la sentencia debería haber sido mucho más dura, y explicó: "Esto es la contradicción máxima de la justicia. Pero no sólo de quien lo ha hecho, sino también para los que han apoyado o han defendido consciente o inconscientemente su permanencia en el órgano del Poder Judicial. Y esto es algo insólito que deberían explicar".En el mismo sentido, el socialista Pasqual Maragall, alcalde de Barcelona, exigió ayer que CiU dé explicaciones públicas sobre la "equivocación" que supuso proponer a Estevill. Pere Esteve, secretario general de Convergència Democrática de Catalunya (CDC), recordó que todos los grupos políticos apoyaron de forma unánime esa candidatura. Para Joaquín Almunia, portavoz del PSOE en el Congreso, la condena es "blanda, porque son irregularidades muy graves".
Sala quiere también explicaciones de José Luis Manzanares, vocal del CGPJ que se distinguió por su apoyo "a ultranza la Pascual Estevill, y de o tras personas que creen que ha obedecido a una cuestión de técnica jurídica, cuando no era así". Manzanares insistió ayer en que no había motivos jurídicos para destituir al ex juez en el CGPJ cuando se planteó. Sin embargo, ayer, por primera vez, Manzanares dijo: "De haber, estado en su pellejo, habría dimitido". Y precisó que, si hay que depurar responsabilidades, "se busquen entre los, que le trajeron al CGPJ".
Otras fuentes del CGPJ recuerdan que los vocales próximos al PP, como Margarita Mariscal de Gante -hoy ministra de Justicia-, Andrés de la Oliva o el propio Manzanares, trataron de querellarse contra el vocal progresista Ignacio Sierra, ahora dimisionario, por haber denunciado que Pascual Estevill trató de comprar el voto al también vocal del CGPJ Gregorio García Ancos, ofreciéndole un puesto de trabajo para uno de sus hijos.
La sentencia no ha sido analizada por el Colegio de Abogados de Barcelona, al que 100 letrados acudieron en diciembre de 1995 pidiendo que Pascual Estevill fuera suspendido.
