Los valores familiares se cotizan a la baja en EE UU
Hace poco, las grandes cadenas de Estados Unidos (NBC, ABC, CBS y Fox) cerraron la temporada 1995-96, anunciaron las nuevas series que estrenarán en otoño y reflexionaron sobre lo que más ha gustado al público en los últimos nueve meses. Por los temas que han estado- en boca de todo el mundo, y por la lista definitiva de Nielsen (empresa que mide la audiencia), tanto las telecomedias como los dramas del epicentro de esta década en EE UU están habitados por personajes solteros desempleados y, a menudo, deprimidos.La mayoría vive en Nueva York un ambiente idóneo para sus paranoias y su actitud, de estar de vuelta de todo. La era de las series familiares de postal está en su ocaso, y este año sólo ha habido una comedia de este tipo entre las más vistas, Home improvement, pero, su audiencia va en descenso. La familia de moda en la tele americana es la de la graciosísima serie Third rock from the sun, y son todos extraterrestres con forma humana.
De los 10 programas más vistos cinco ocurren en Nueva York, y la proporción es más abrumadora cuando se observa que, de los otros cinco, uno es un programa de deportes y otro un informativo. De ese top 10, que en realidad es un top 8, siete son series con protagonistas divorciados o separados, o bien son firmes creyentes en la libertad que proporciona el ser soltero-a.
Si añadimos que la mejor comedia de EE UU en estos momentos, Seinfeld, se despidió con un episodio en el que la muerte de la novia de uno de los personajes es objeto de comedia, y que en el último capítulo del mejor drama, Policías de Nueva York, matan al hijo del detective Sipowicz y éste vuelve a caer en el alcoholismo, hay que preguntarse dónde fueron a parar los años de las lecciones morales de Bill Cosby y las familias tupperware como la de Los problemas crecen.
Incluso una serie teóricamente arriesgada como El príncipe de Bel Air acabó el año en el puesto 50º de la lista de Nielsen. Esa lista está encabezada por la sangrienta Urgencias, con una media de 32 millones de espectadores a la semana. En segundo lugar, y con 31,6 millones, está Seinfeld, el verdadero ganador moral de la temporada.
Seinfeld, que en España pasó sin pena ni gloria (Antena 3) por culpa de un perverso emplazamiento horario y un doblaje hecho a mala idea, es en EE UU algo más que un fenómeno. Los críticos de televisión se están planteando seriamente si se trata de la mejor telecomedia de la historia del medio. Afinadísimo espejo de la cultura urbana de EE UU, su humor minimalista y sus argumentos desternillantes han creado escuela.
Una escuela que se apiña también en los primeros puestos de audiencia este año: Friends, Caroline in the city, The single Guy y Boston common (y un poco más abajo, The John Larroquete show, Mad about you y Frasier) están todos en la órbita de Seinfeld. Lo que puede concluirse de todo esto es que, a excepción del mencionado Home improvement, para estar este año en lo alto de la lista de audiencia en EE UU ha habido que responder con imaginación a un público exigente y televisivamente muy culto.
