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España cede "temporalmente" a Francia el mando de las tropas marroquíes en Bosnia

Miguel González

Los casi 1.300 militares marroquíes que a partir de hoy zarparán hacia Bosnia-Herzegovina, para integrarse en la fuerza de paz de la OTAN (Ifor), no estarán bajo mando español, como se había anunciado, sino francés. Aunque el propio rey Hassan había aceptado que sus soldados se pusieran a las órdenes de un general español, el batallón marroquí se instalará finalmente en el Monte Igman, cerca de Sarajevo y muy lejos de la zona de responsabilidad española, en torno a Mostar. Se trata, según fuentes del Ministerio de Defensa español, de una medida "de carácter temporal".

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Teóricamente, en los documentos oficiales, el batallón marroquí sigue encuadrado en la brigada española. Realmente, sobre el terreno, se integrará en la brigada francesa desplegada en el monte Igman.Desde el punto de vista formal se trata de una cesión temporal de dicho batallón que, sin embargo, a la vista del desarrollo de los acontecimientos, difícilmente se modificará antes de que acabe el año, cuando expira el mandato de lfor.

El acuartelamiento de las tropas marroquíes junto a Sarajevo obedece, según las fuentes consultadas, a que su presencia no es necesaria en la zona española, donde tampoco hay sitio para alojarlos.

Por el contrario, en Igman están libres las instalaciones del batallón malayo, trasladado al sector británico, y además faltan tropas, pues Francia no ha aportado uno de los dos batallones prometidos y el contingente egipcio no ha obtenido el visto bueno de la OTAN.

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En todo caso, el traspaso del batallón marroquí a la brigada francesa no ha hecho sino confirmar los temores de quienes nunca acabaron de creer que se pondrían bajo mando español.Casi todos los soldados marroquíes hablan francés y sólo unos pocos, castellano. Francia ha patrocinado, además, la incorporación de Marruecos a la operación, con un crédito de 100 millones de francos (casi 2.500 millones de pesetas).

Los tres buques que, a partir de hoy, zarparán desde el puerto de Agadir (Marruecos) rumbo a Ploce (Croacia), con el batallón marroquí a bordo, han sido alquilados a Francia.

Los 50 militares marroquíes que llegaron recientemente a Bosnia para buscar alojamiento a sus tropas ni siquiera pasaron por Mostar, sino que fueron directamente a Sarajevo.

El ministro de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra, presentó el pasado 13 de enero la integración de los soldados marroquíes en la brigada española como un "acontecimiento histórico", dados los conflictivos antecedentes entre los dos países. Fuentes de Defensa han subrayado que, aunque al final no se materialice, lo relevante políticamente es que el propio Hassan aceptara poner sus tropas bajo mando español.

Sin contar con la presencia del batallón marroquí, España está ultimando su nuevo contingente, que podría ser algo menor que el actual (con 1.750 efectivos), dada la situación de calma y la consiguiente reducción de las misiones militares, con el propósito de hacer el relevo a lo largo del mes de mayo.

Aunque el grueso de las tropas lo aportará la Brigada Paracaidista, con base en Alcalá de Henares (Madrid), por primera vez desde que llegaron a la antigua Yugolavia los primeros militares españoles, en octubre de 1992, se enviará a la zona una unidad no perteneciente al Ejército de tierra.

Se trata de un batallón de Infantería de Marina, procedente del Tear (Tercio de la Armada), con sede en San Fernando (Cádiz), e integrado por unos 500 militares.

La Infantería de Marina trasladará a Bosnia tres compañías ligeras, dotadas con los vehículos ligeros M-998 Hummer, capaces de montar ametralladoras y misiles TOW, recientemente adquiridos a Estados Unidos.

El mando del contingente corresponderá, no obstante, al jefe de la Brigada Paracaidista, el general Luis Carvajal, quien ya estuvo al frente de la Agrupación Madrid cuando la Bripac operó, por primera vez en Bosnia, hace ahora dos años.

Lo que sí ha hecho ya España, ante la reducción de operaciones militares, es retirar dos de los ocho cazas F-18 que, desde noviembre de 1994, tenía desplegados en la base italiana de Aviano (Italia) y que el pasado verano participaron en los bombardeos de la OTAN contra posiciones serbias.

Los dos F-18 se encuentran en España, aunque siguen adscritos a la operación de Bosnia y a disposición de la OTAN para volver de inmediato si ésta los reclama.

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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