Goles y lágrimas por David

En el campo de fútbol del Moscardó (Usera) hubo ayer más lágrimas que goles, más emoción que juego. Sobre el césped, dos equipos en recuerdo de David González Rubio, el futbolista de 20 años de la Agrupación Deportiva Cultural La Mancha que fue asesinado en la madrugada del domingo 20 de enero en el barrio de Moncloa durante una reyerta.Su equipo de Tercera Regional, donde jugaba de delantero centro con la camiseta número 10, se enfrentó a un combinado de jugadores juveniles de la Comunidad de Madrid, en un estadio ocupado por cerca de 2.000 personas.

Diego Rubio, el presidente de la ADC La Mancha, suspiraba en la grada: "Le queremos recordar como un gran deportista y como un gran chico que estuvo durante toda su vida trabajando con nosotros". En el palco la madre de David, Carmen, cerraba los ojos humedecidos. Luego los abría mirando al cielo: "Cómo se ha volcado la gente con mi hijo", decía. "No es futuro para la juventud morir cada fin de semana. Es más bonito compartir, estar juntos y vivir cada uno sus ideales", gemía Carmen. El padre de David, José Eduardo, decía: "Espero que la gente se dé cuenta de lo que está pasando y que los padres reaccionen ante las agresiones.

Antes del partido de fútbol, los 300 deportistas de La Mancha, con su elástica blanca, entregaron una flor a los padres de David. Después, un compañero de David, Eduardo, leyó un manifiesto que rezaba: "Nada ni nadie nos lo va a devolver, pero su recuerdo perdurará en todos nosotros", concluyó: Y acabó diciendo: "Sus piernas no volverán a golpear un balón, pero allí donde esté seguro que su empuje, su ilusión y su esperanza permitirán a sus amigos y familiares contar con David para siempre"'

Al encuentro asistió el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano; el portavoz socialista, Juan Barranco, y el concejal de IU Félix López Rey, otros concejales y el presidente de la Federación de Fútbol de Madrid, Vicente Temprado. El regidor madrileño anunció: "Vamos a bautizar el campo de fútbol de Pradolongo de Usera con el nombre de David González". Luego entregó una placa a los padres de David en la que se podía leer la frase: "Tenemos que frenar la ola de violencia. Que David sea la última víctima de la barbarie".

El partido de fútbol entre el equipo de la asociación juvenil La Mancha y el combinado de Madrid no se pudo completar por culpa del estado del césped. El terreno de juego, convertido en un barrizal, recortó el encuentro a tan sólo 20 minutos. "Da igual lo que hayamos jugado, lo importante era estar aquí", señaló Frasco, su entrenador. La camiseta de David fue la única que no se manchó de barro. Sus padres se la guardaron al acabar el encuentro.

La próxima semana, entidades de Usera, amigos y compañeros del instituto de David González se concentrarán en la Junta Municipal de Moncloa, a 200 metros del paseo de Moret, donde se desató la pelea callejera que acabó con David.