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Antonio Gutiérrez: "Hubiera sido más fácil realizar un congreso con vaselína"

Antonio Gutiérrez consumó ayer su estrategia para esbozar un nuevo modelo sindical dentro de Comisiones Obreras, cuyos rasgos de identidad son reforzar el diálogo y abandonar cualquier etiqueta política. Una decisión con un alto coste, puesto que ha supuesto dividir nítidamente la organización y prescindir de Marcelino Camacho como presidente del sindicato. Tal vez por eso, el secretario general de CC OO, que ayer inició su tercer y último mandato, se apresuró a lanzar el siguiente mensaje en el discurso de clausura del sexto congreso del sindicato: "Hubiera sido más fácil realizar un congreso con vaselina".El líder de Comisiones no esperó ni un momento para llevar a la práctica sus ideas. En la rueda de prensa posterior a la clausura, aclaró que Agustín Moreno y los otros seis miembros del sector crítico tendrán en la ejecutiva un papel de vocales. Las secretarías serán doce, reservadas para los representantes del sector oficial que acompañaron a Antonio Gutiérrez en la lista que optó a la ejecutiva.

Esta decisión estuvo acompañada por reiterados llamamientos a la unidad interna. Gutiérrez en una sala del Palacio de Congresos, y Moreno en otra, coincidían en asegurar que "el enemigo" de ambos está fuera del sindicato. Además, el secretario general espera-que "el trabajo sindical sirva para restañar las heridas que se han abierto en este congreso" y el líder de los críticos aseguró tajantemente que no habrá ni una sola baja en el sindicato como consecuencia de los enfrentamientos registrados durante los últimos cuatro días.

Los mensajes de Antonio Gutiérrez no sólo tuvieron clave interna. También giró su atención hacia la política y hacia la otra central sindical mayoritaria, UGT, cuyo líder, Cándido Méndez, acudió a la clausura del congreso. "Presida quien presida el próximo Gobierno, se encontrará unas Comisiones Obreras dispuestas a afrontar los retos que tiene España, abiertas al diálogo y la negociación", dijo. "Ello no supone", precisó irimediatamente después, "que renunciemos a nuestros principios y a ser más firmes y decididos que nunca a la hora de impedir cualquier rtgresión en el orden social". En cuanto a las elecciones que se celebrarán el próximo 3 de marzo, se limitó a recomendar a todos sus afiliados que acudan masivamente a la llamada de las urnas.

Ante la duda que surge ahora sobre las diferencias que existen entre la estrategia de UGT y el modelo aprobado por CC OO afirmó: "Yo me felicitaré si las diferencias con UGT son cada día menores y trabajaré por una unidad de acción sin hipocresías".

El sector crítico sale del congreso con un sabor "agridulce", según palabras de Moreno. Lo agrio, por lo sucedido con Camacho; lo dulce, porque aumentan -de cuatro a siete- sus representafites en la ejecutiva.

La distribución de las tareas de la dirección se aprobará formalmente el próximo martes. Entonces se despejará qué medios les ofrece el sector oficial. En concreto, si contarán con despachos y sueldos los siete vocales de la oposición. Salce Elvira, hasta ahora secretaria de Empleó y número dos de este sector, está estudiando minuciosamente qué ocurrió tras los congresos en los que se presentaron tres y cuatro listas a la dirección y la infraestrustura que les dio la mayoría en cada caso.

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