El tren accidentado en Despeñaperros mantiene bloqueada la línea
Renfe no pudo restablecer ayer el tráfico ferroviario a su paso por el puente de Despeñaperros (Jaén), donde a las cuatro de la mañana del día de Navidad descarriló el expreso Barcelona-Málaga-Sevilla, en el que viajaban 220 personas. Los trabajos para retirar el tren accidentado proseguirán hoy. El siniestro, en el que fallecieron los dos maquinistas, ha tenido como consecuencia la inhabilitación del servicio por este puerto, que afecta a 36 trenes y a unos 7.000 viajeros diarios. La compañía ha habilitado servicios de autobuses entre Linares y La Mancha y ha reforzado la línea de alta velocidad (AVE).
Renfe espera que para la madrugada del jueves circulen de nuevo los primeros expresos por Despeñaperros, una vez que se dé una solución al tren que queda suspendido, para lo que se estudia la posibilidad de arrojar el convoy por el desfiladero o introducir una grúa de gran tonelaje para sacarlo del lugar si las condiciones orográficas lo permiten.Los dos maquinistas fallecidos en el accidente, Rafael Castillejo García, de 55 años, y Antonio Laredo Ramírez, de 49 años, fueron enterrados ayer en Córdoba, de donde eran naturales. Castillejo estaba casado y era padre de tres hijos. Laredo, también casado, tenía dos hijos.
José Cubero, secretario de acción sindical de Comisiones Obreras de Jaén y trabajador del sector ferroviario, ha criticado duramente a Renfe por lo ocurrido. En su opinión, la reducción de plantilla que se aplica en la empresa está afectando a la vigilancia de mantenimiento de la vía.
El sindicalista añadió que en el tramo entre Linares-Baeza y Moreda (Granada), la patrulla de vigilancia está compuesta por tres personas, que deben hacerse cargo de 100 kilómetros. Partidos y sindicatos recuerdan ahora que llevan años pidiendo a la compañía que invierta en el desdoblamiento de la vía en este tramo.
