El rito del pañuelo desató los tiros en una boda gitana
Las familias Gabarre y Jiménez se enfrentaron a tiros durante la celebración de una boda gitana en Fuenlabrada (165.000 habitantes) a causa de una discusión desata da por el rito del pañuelo, según informa la Jefatura Superior de Policía. Esta costumbre gitana consiste en que una mujer verifique la virginidad de la novia in troduciéndole un pañuelo en la vagina. Si sangra, es virgen. La reyerta comenzó cuando los parientes de la recién casada se negaron a cumplir con la tradición. En medio del banquete, que se desarrollaba en el restaurante Bademar del polígono Cobo Calleja, los Jiménez, familia del novio, manifestaron que era el momento de proceder al rito. Los Gabarre, parientes de la novia, se negaron.
A raíz de esa actitud, integrantes de ambos clanes se retaron sin que se llegara a desatar la riña. Pero la discusión creció hasta que un grupo de comensales, según la policía, tuvo que reducir y expulsar de la sala a un asistente que hizo ademán de sacar una pistola a la altura de la cintura. Luego salió a la calle y disparó contra el edificio y los invitados de la boda que habían abandonado el salón. (véase EL PAÍS del pasado domingo). Entonces se desencadenó el tiroteo entre los Gabarre, familia de Palencia, y los Jiménez, vecinos del barrio chabolista de La Celsa.
En el tiroteo resultaron heridas tres personas. Jerónimo Jiménez, de 38 años, padre del novio, recibió un perdigonazo en el ojo derecho. Su estado era grave ayer, y se encontraba ingresado en el hospital Doce de Octubre. Jesús B. B., de 44 años, y Luis V. S., de 28, fueron atendidos en el mismo hospital de lesiones leves. Ambos fueron dados de alta.
Ya al final de la pelea fue arrollada por un coche Adela Jiménez, de 44 años, prima de la novia. Se encontraba ingresada ayer en la UVI del Gregorio Marañon a causa de las heridas sufridas por el atropello de un vehículo industrial, según fuentes policiales.
En el lugar de los disparos, los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía recogieron seis proyectiles de 9 milímetros Parabellum. La policía no había conseguido detener ayer por la tarde al autor de los disparos y al causante del atropello. Sin embargo, los agentes aseguran que están identificados. La familia Gabarre abandonó Fuenlabrada el pasado sábado por la noche. Varias patrullas de la Policía Nacional establecieron un cerco en la ciudad palentina.
