Nueva bronca entre 'sprinters' la víspera de la cronoescalada
Una etapa cuesta abajo desde las montañas suizas hasta la llanura lombarda, un sol aplastante y la visión cercana de la cronoescalada de mañana. ¿Qué más necesitaban los corredores para rodar tranquilos y agrupados? La escapada de modestos era imposible en ese tipo de terreno; tampoco soplaba el viento y el cansancio se hace notar en el número creciente de abandonos. Todos se abonaron a 40 kilómetros por hora a una llegada masiva. Y ahí comenzó y terminó todo.El Giro se ha quedado, vía abandonos, sin sus mejores llegadores. No están ya ni Cipollini, ni Minali, ni Baldato, ni Svorada, los hombres que han copado las llegadas masivas. La segunda fila ha tomado las riendas y la igualdad, mayor. Así, corrdores como Manzoni, Fidanza, Lombardi o Citterio se vieron ayer con un triunfo en el Giro en perspectiva. Demasiado como para arrugarse. Y ninguno se arrugó. Manzoni empujó a Lombardi, éste cerró a aquél contra las vallas, y entre medias Citterio que, después de llegar segundo ganó por descalificación de los dos que confundieron ciclismo con malas artes. Punto final a una etapa de recuperación de fuerzas en vistas de lo que tienen hoy por delante.
La cronoescalada ha sido los últimos años la etiqueta diferencial del Giro. Un año fue Sestriere,otro Il Bocco, y siempre con carácter decisivo. Quien sale líder de esta etapa llega de rosa a Milán. Los 43 kilómetros entre Cenate y Selvino Aviatico, con un puerto a mitad de recorrido -el Gallo, duro y con descenso peligroso- y otro que sirve de meta, son, así, la última reválida de Rominger.
El suizo cuenta con una ventaja cómoda -más de tres minutos- y es un verdadero especialista tanto en las contrarrelojs -ha ganado las dos disputadas hasta ahora en este Giro- como en la montaña. No es mal equipaje para resistir el acoso individual de dos verdaderos especialistas en, la cuestión: Ugrumov, que en la cronoescalada de Avoriaz del pasado Tour sacó 3,16 a Induráin, y Berzin, que remachó el pasado Giro en Il Bocco, con 20 segundos sobre Induráin.
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