González: "Vamos a ganar a las encuestas"

Felipe González apareció sonriente. No parecía afectado por el mal trago de las encuestas. Tampoco parecía afectado el público que abarrotaba el polideportivo municipal de Gijón, que le recibió con calor. Pero, pese a la sonrisa, sacó varias veces el tema. La primera, nada más empezar el mitin: "Vuestro afecto es lo que nos mantiene en esta lucha tan dura. Vivimos momentos de dificultad y euforía, por parte de la derecha. Estamos preocupados por su arrogancia porque creen que lo que dicen las encuestas es lo que va a pasar el 28 de mayo. Pero ¡les vamos a ganar a las encuestas!", aseguró el líder socialista.

El público de González ayer en Gijón fue distinto al de la víspera en Extremadura. Era un público urbano al que costaba entregarse al aplauso más que al extremeño, poblado de hombres del campo, pero González sabía que los 12.000 asistentes al mitin estaban en él. A fin de cuentas, Asturias es, junto con Extremadura y Castilla-La Mancha, una de las tres regiones donde los socialistas pueden gobernar si consiguen el apoyo de Izquierda Unida, según los últimos sondeos.Tampoco el líder socialista hizo el mitin de Extremadura. Apenas se refirió a Aznar. Tampoco habló del "orgullo asturiano" o del papel del presidente autonómico en la implantación de una conciencia regional. Al fin y al cabo, Extremadura es una región muy beneficiada por el efecto redistribuidor del Estado de las autonomías, y Asturias ha padecido a lo largo de la última década un declive industrial profundo.

De lo que sí habló fue de la "mezcla de ilustración y socialismo democrático" que representa Asturias en la Historia. Y a partir de esa tradición hiló su ataque al PP, al que siguió identificando "con la derecha de siempre". "Están demasiado crecidos. Ya insultan. Dicen que me van a enseñar el camino de salida de La Moncloa. Soy un demócrata de toda la vida. No me tienen que enseñar el camino de salida. El día que no tenga votos, no estaré un minuto más en La Moncloa". González hizo esta afirmación después de insistir en que estas elecciones son municipales y autonómicas, en las que, por tanto, no se juega la presidencia del Gobierno.

También en algún momento González se puso nostálgico. Habló de la tradición socialista de Asturias, de las dificultades que los socialistas de esta región arrostraron en el pasado y, con la comparación, relativizó los actuales obstáculos por los que atraviesa el PSOE de 1995.

Hizo una breve incursión crítica al programa del PP, a su proyecto de reforma fiscal y a la privatización de la sanidad. "Dicen que quieren que la sanidad funcione y están abogando por su privatización. Con la privatización hay un grave problema de discriminación". También arremetió contra los populares por querer aprovechar la bonanza económica lograda en su mandato. "Prometí que superaríamos la crisis y ya la tenemos a nuestras espaldas", dijo. El coordinador general de Izquierda Unida, Julio Anguita, fue también objeto de sus críticas por haber hecho aflorar "ese viejo discurso de que todos los males de España nos vienen de Europa".

Pero los sondeos le preocupaban y volvió otra vez sobre ellos, esta vez desafiante: "Las encuestas también decían en 1993 que ganaba el PP y después les pasó lo que les pasó. La buena encuesta será la del día 28". González pidió la concentración del voto de la izquierda en el PSOE como ya lo hiciera la víspera en Extremadura. El líder socialista dijo que esta vez la derecha había actuado de "forma inteligente" al concentrar todo el voto y que, sin embargo, la izquierda aparecía dividida. Puso mucho énfasis en pedir a los votantes de IU que den su voto a los socialistas porque "sólo el PSOE tiene posibilidades desde la izquierda de ganar a la derecha".

González terminó pidiendo la movilización de los electores ara combatir la abstención, la gran preocupación del PSOE y la causa del desastre electoral de las europeas de junio del año pasado. En tono muy grave hizo un llamamiento: "¿Sabéis por qué pide, que se ejerza el derecho a votar? Porque en la urna todos somos iguales. No me cabe duda de que la izquierda somos más".

La intervención de González fue precedida por el candidato a la presidencia a la Comunidad, Antonio Trevín. Éste, que siguió la guía de campaña del PSOE al dedillo, planteó la contradicción entre izquierda y derecha en el campo de la reconversión industrial, y destacó el contenido social que en Asturias ha tenido la adecuación de la siderurgia después de la crisis industrial. "Ahora se puede decir que la siderurgia tiene futuro en Asturias", machacó una y otra vez el candidato socialista a la presidencia.

[Por otra parte, el ex ministro de Economía Carlos Solchaga dijo ayer en Burlada (Navarra) que el PP sí tiene, un programa, pero que éste sólo ha gustado "a algunos banqueros y al presidente de la CEOE", según recoge Efe. Solchaga, que regresa a la escena política tras un año de retiro, aseguró que el PP no enseña el programa porque en España "sigue habiendo una mayoría sociológica de izquierda".]