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Arzalluz y el vicepresidente tratan hoy de recuperar la relación entre Gobierno y PNV

El vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, y el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, se entrevistan hoy en La Moncloa con la pretensión de recuperar las relaciones entre el Ejecutivo y los nacionalistas vascos, distanciadas durante las negociaciones previas al debate sobre el estado de la nación de los días 8 y 9 de febrero. El distanciamiento se zanjó con la abstención del Grupo Parlamentario del PNV, encabezado por Iñaki Anasagasti, en la votación de la resolución conjunta del Gobierno y CiU.Los nacionalistas pondrán sobre la mesa cuestiones urgentes, pendientes del desarrollo del Estatuto de Gernika. Las competencias sobre el personal de la Administración de Justicia, el Inem y la formación profesional figuran en la agenda de Arzalluz.

La reunión no se limitará a abordar la situación política general, como sucedió en el anterior encuentro que mantuvieron Serra y Arzalluz, a mediados de enero. En esta ocasión ambos interlocutores abordarán temas autonómicos concretos.

Las bases nacionalistas vascas presionan cada vez más sobre la dirección del partido para que el apoyo del PNV al Gobierno tenga contrapartidas desde la Administración central. "Necesitamos gestos desde la Administración central para poder volver al discurso público de apoyo al Gobierno", aseguran fuentes nacionalistas vascas. La sensación de agravio comparativo del Gobierno con relación a CiU late en la actitud del PNV.

El portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, ha lamentado, a lo largo de los últimos días, la ausencia de una interlocución clara entre el Gobierno y los nacionalistas vascos. También ha denunciado los incumplimientos del Gobierno de los compromisos del debate sobre el estado de la nación de abril del año pasado.

El vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, manifestó ayer la voluntad del Ejecutivo de proceder a la lectura conjunta con el PNV del Estatuto de Gernika, de las políticas a aplicar y de establecer un diálogo fluido. El Gobierno necesita del PNV para apuntalar su relación política con el bloque nacionalista, cuyo apoyo parlamentario decisivo depende de CiU.

Serra se comprometió también a disponer en breve plazo de un criterio claro por parte del Gobierno en dos de los temas más espinosos en sus relaciones con CiU, como son la modificación de algunas leyes de bases, como la del suelo, y la reforma de la Administración periférica del Estado, con un nuevo estatus para los gobernadores civiles.

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